“Pensaba que la vida era solo aquello y lo demás era un sueño”. Al hombre canoso y atildado, que llegando a su octava década de edad recuerda lo que le sucedió a los 26, la cárcel se le había convertido en la única realidad y todo lo demás, la vida “real”, se había vuelto un sueño. Exactamente al revés de lo que podría suponerse. Caetano Veloso fue arrestado en 1968, cuando la dictadura militar que sojuzgaba Brasil había empeorado sus modales, cerrando el Congreso y haciendo recrudecer la represión. Caetano fue arrestado por fuerzas policiales el 27 de diciembre de ese año en su casa de San Pablo, junto a su amigo Gilberto Gil, entre otros, iniciando allí una pesadilla de dos meses que el autor de “Joia” recuerda ahora con curiosa transparencia, como si la pesadilla hubiera sido apenas un leve sueño despierto. Ese período en prisión es el que evoca Narciso em férias (Narciso de vacaciones), documental que posiblemente sea el punto más saliente de la cuarta edición del Festival Escenario, que se inicia el jueves 22 de setiembre (ver abajo).

Producida por Paula Lavigne y codirigida por los realizadores Renato Terra y Ricardo Calil, Narciso em férias es una larga entrevista de casi hora y media con Veloso, resuelta de la manera más sencilla que puede imaginarse: una cámara digital, un micrófono, un entrevistador que interviene poco, un entrevistado reflexivo y articulado, un muro al fondo y una serie de planos fijos, que eventualmente varían de tamaño entre un corte y otro. Lo que importa es el relato y el cuerpo, la voz, los gestos del entrevistado, tan medidos como su aspecto. Caetano luce tan calmo y relajado como cuando canta, aparentando unos diez años menos de los que tiene y recordando sin ira.

Con muita calma para pensar, como pedía su mentor Joâo Gilberto, lo que el músico bahiano relata es un mal sueño hecho y derecho: los arrestan sin explicarles la razón, desfilan ante distintas autoridades militares sin saber por qué están allí, lo encierran en un calabozo individual tal como los que se ven en las películas (puerta metálica con una puertita vaivén abajo, para pasar la incomible comida, una manta sobre el piso, un lavatorio, un inodoro, un ventanuco con rejas demasiado alto para asomarse). Prohibición de leer, de tocar música, y Caetano que, según cuenta, “no conseguía llorar”.

Finalmente se entera de por qué los arrestaron: por la denuncia de un DJ oficialista, que según afirmó estaba al tanto de que durante la presentación en un club nocturno Veloso y Gil se habrían burlado del himno nacional, y de la bandera. “¿Cantaría el himno con la melodía de “Tropicalia”?”, le pregunta un interrogador al cofundador del tropicalismo, y él responde en ese momento (ahora sonríe ante el disparate) que no, que eso es musicalmente imposible. 

El propio Caetano lee el voluminoso expediente (180 páginas) que el historiador Lucas Pedretti, amigo de su nuera, acaba de desempolvar de algún archivo oscuro. Hay otro momento en que el hermano de Maria Bethania ríe francamente, porque no recordaba: cuando se lo acusa de “cantor de protesta de carácter subversivo y desvirilizante”. “¡Desvirilizante! ¡Está bien eso! En realidad podría asumir los dos cargos, me parecen justos.” No parecen haber resultado suficientes para detenerlo por más tiempo (o algo peor, hay que recordar que estaba en las manos de los militares, sin un solo derecho individual de por medio), y en febrero del '69 lo dejaron en libertad, no sin otras incidencias que el documental detalla, y que merecerían figurar en una antología del absurdo. O de lo siniestro.

“Brasil tiene al día de hoy un gobierno que dice que la dictadura militar fue algo bueno, así que es oportuno hablar de ese período como lo hago en la película”, dijo Veloso al momento del estreno de Narciso em férias. A propósito, el título del documental es el mismo que el de un capítulo de su libro Verdad tropical, en el que relata ese período de su vida. “En la primera revista que pude leer en prisión estaban las fotos de la Tierra tomadas desde el espacio”. Eso es lo que inspiró el que posiblemente sea su tema más sublime, “Terra”, del cual durante el rodante de créditos finales puede oírse una versión extraordinaria, con las cuerdas de acero de la guitarra sonando en primer plano.

Narciso em férias podrá ver el domingo 25 a las 18, en la Sala Lugones del Teatro San Martín.

La programación del festival

La música toma la pantalla

Sinéad O’Connor. Foto: AFP.

La cuarta edición del Festival Escenario. Cine + Música se desarrollará en la sala Lugones del Teatro San Martín desde el jueves 22 hasta el domingo 25 de setiembre, y en forma gratuita en la plataforma Qubit entre el 22 de setiembre y el 22 de octubre. A continuación, algunos puntos destacados de la programación de la Lugones. El film de origen noruego Oh, It Hertz! desempolva una vieja presunción: fue el régimen nazi el que impulsó la modificación del estándar de afinación de los instrumentos musicales, pasando de los viejos 432 Hz a los actuales 440 Hz (jueves 22 a las 15). La ucraniana Roses. Film-Cabaret narra el crecimiento del grupo performático Dakh Daughters (cuyo hit es una cruza de punk y ritmos industriales con una estética de cabaret de los años 2º), en paralelo con el crecimiento de la disidencia de su país, desde los sucesos de 2013 hasta el momento de la invasión rusa (jueves 22 a las 21).

Un cuento Êzîdî, del argentino Pablo Tosco, presenta el relato de un representante de la minoría iraquí yazidí, desde el momento de la toma de su pueblo por parte del Ejército Islámico hasta la recuperación, cuando Fahad abrió una escuela de música para niñas y niños exiliados y vueltos a la ciudad (viernes 23 a las 15). La noche de la bestia es un film de ficción que relata la previa de la llegada de Iron Maiden a Colombia, en 2008 (sábado 24 a las 15). Nothing Compares revisa la trayectoria de la irlandesa Sinéad O’Connor, narrada por ella misma e incluyendo, por supuesto, el momento en que rompió una foto del papa Juan Pablo II en cámara, durante una emisión de Saturday Night Live (sábado 24 a las 18). Según el sitio imdb, The Lost Record es un film de ciencia ficción, rock and roll, ensayo y fantasía, sobre arte, música, fetiches, creación, amor y discos. Solo puede agregarse que está basado en el LP homónimo, del grupo Escape-ism (sábado 24 a las 21). Por último, LCDB – El documental testimonia la creación de un club social de Villa Crespo, creado en los '90 por un grupo de skinheads antifascistas (domingo 25 a las 15).

La programación online (www.qubit.tv) va a incluir todos los films a proyectarse en la sala Lugones, más otras secciones, títulos y focos. Lo más destacado es One + One, la película en la que Jean-Luc Godard logró filmar en vivo, en 1968, el proceso de gestación y grabación definitiva, desde los ensayos hasta las tomas finales, de "Sympathy for the Devil”, de The Rolling Stones.

Más info en www.festivalescenario.com