Desde Houston
Semáforos apagados después de medianoche, edificios públicos sin agua caliente y monumentos sin iluminación. En los hogares el aire no puede estar a menos de 27 grados, a pesar de la ola de calor que invade Europa. La crisis energética causada por el impacto de la guerra en Rusia obligó a los gobiernos a tomar medidas para ahorrar energía. En Houston hacen 31 grados de sensación térmica, pero adentro del Hotel Houstonian, donde el presidente Alberto Fernández anunció que promulgará un proyecto de ley para multiplicar las inversiones energéticas en Argentina, el aire acondicionado está a 18 grados. Es que en Houston, la energía sobra.
La semana que viene, el Presidente enviará un proyecto de ley para dar certeza a las empresas que producen gas y litio y brindar un marco propicio para la instalación plantas de licuefacción de gas, aquellas que permiten convertir el gas en un líquido frío y facilitar su transporte para la exportación: "Tenemos que pensar el rediseño del país fundado en una nueva matriz donde la energía sea el eje central del desarrollo", aseguró Fernández ante una audiencia de más de ochenta empresarios de la familia petrolera texana.
El proyecto no es el mismo que se presentó en la errática ley de hidrocarburos, que no se aprobó en el Congreso, o el esquema diferencial para el sector hidrocarburífero de acceso a dólares a cambio de más producción, el cual desde el sector empresario acusan no ver resultados. En éste trabajan el ministro de Economía, Sergio Massa, y la secretaria de Energía, Flavia Royón. Aseguran que es una iniciativa para dar confianza, estabilidad y seguridad jurídica para la producción de gas, litio y plantas de licuefacción de gas. En el Gobierno estiman que ingresará la semana que viene al Congreso.
No hay nada más protagonista que el sector energético en Houston, la ciudad más poblada de Texas. El paisaje de fondo del viaje entre el aeropuerto intercontinental George Bush y el Hotel Houstonian donde se llevó a cabo la exposición "Potencial Energético. Impacto global de Vaca Muerta" son kilómetros de empresas que alquilan equipos de perforación, grúas, trailers y maquinaria pesada. Son camiones transportando caños y petróleo. También está la School of Sciences and Technology. Para cargar nafta, los autos pueden parar en las estaciones de servicio de Chevron y Exxon.
"La Argentina tiene recursos en condiciones de competitividad y eficiencia para abastecer al mundo de energía. No solo por Vaca Muerta, sino también por la abundancia de viento, sol y litio. El mundo está en medio de dificultades energéticas severas y en la Argentina está parte de la solución. Están los recursos naturales, el conocimiento acumulado y la decisión política necesarios para exportar energía al mundo", explicó el Presidente y, reforzando las señales de estabilidad que hace diez días comenzó a dar Sergio Massa en la misma ciudad y reanimará la semana que viene Flavia Royón en el evento Vaca Muerta Shale Day, también en Houston, sentenció: "No hay obstáculos".
Con una filmina de fondo que rezaba "Almuerzo en honor del presidente Alberto Fernández", más de ochenta empresarios de las principales firmas del sector se saludaban. Las conversaciones que se escuchaban caminando por el salón se alternaban entre los '¿Cómo andas, tanto tiempo?' -muchos se reencontraban porque viajaron especialmente a Houston por esta presentación- y las reuniones de trabajo. "Es que esa es la clave entre el offshore y el onshore", hablaban. Las caras más conocidas entre los invitados eran las de Pablo González de YPF, Juan Martín Bulgheroni de PAE, Bill Langin de Shell, Eric Dunning de Chevron. También representantes de Total, Exxon y Tenaris.
Muchos de ellos ya habían estado hace diez días reunidos con Sergio Massa en la misma ciudad. Sobre las visitas con tan poco tiempo de distancia decían a PáginaI12: "El ministro vino a plantar las bases y fue un paso muy importante, pero es clave que el Presidente lo confirme". El embajador Jorge Argüello, también en diálogo con PaginaI12, explicaba que la visita del presidente es un mensaje similar pero "emitido al más alto nivel, lo que le da más sustancia". El propio Fernández se encargó de aclararlo en la conferencia: "No es casual que hace días vino el ministro de Economía, ahora yo y en unos días Flavia Royón y el gobernador de Neuquén, que es de otro signo político. Vaca Muerta es una política de Estado y estamos acá para demostrarlo".
En números
Vaca Muerta es el segundo reservorio de gas no convencional y el cuarto de petróleo no convencional en el mundo. La historia de Vaca Muerta está marcada por la característica del recurso no convencional, almacenado a una profundidad mayor y en una roca con características más hostiles a la extracción por su poca porosidad, que necesita de una fractura para conseguirla. "Todos los indicadores técnicos de la calidad del recurso, como el espesor de la roca madre o la presión del reservorio, son óptimos a nivel internacional en términos comparados con otros sitios del mundo", explicó Fernández.
En diez años, la inversión fue de 32 mil millones de dólares y el costo de extracción bajó de 93 dólares el barril de petróleo equivalente a poco más de 7 dólares en el lapso de diez años, precisamente cuando comenzaron los mecanismos de promoción de Vaca Muerta. "Después de diez años de desarrollo y explotación, Vaca Muerta representa hoy el 40 por ciento de la producción total de hidrocarburos de Argentina. Todo indica que los resultados de la explotación nos seguirán sorprendiendo positivamente por el avance continuo que hemos visto en dos planos: el de la eficiencia y el de la reducción de costos", dijo el Presidente.
Este año la producción de petróleo y gas fue récord en Argentina: "Todavía tendremos una balanza comercial energética deficitaria. Pero la estimación de los expertos, públicos y privados por igual, es que rápidamente iremos revirtiendo esta situación y en 2026, llegaremos a un superávit anual estimado de 13 mil millones de dólares. Faltan solo cuatro años. Para 2040 el cálculo es que habremos duplicado la producción. Y la mitad de esa producción tendrá como destinos los mercados del mundo".
Los grandes jugadores del mercado de la cuenca hoy son YPF, Shell, Vista, PAE, Tecpetrol y Pampa Energía. Hay cuatro empresas que concentran el 90 por ciento de la producción total de petróleo en Vaca Muerta. YPF extrae el 59 por ciento del crudo producido en la cuenca neuquina. Le siguen Shell y Vista, que aportan cada una 11 por ciento del total, y finalmente Pan American Energy (PAE) con el 20 por ciento. En la unidad de negocio gas, YPF aporta el 39 por ciento del total y lo sigue muy de cerca Tecpetrol con más del 20 por ciento desde Fortín de Piedra. Pampa Energía ocupa el tercer lugar con 10 por ciento de producción. Entre las tres empresas concentran el 70 por ciento de la producción de la cuenca.