El situación del ex ministro de Planificación Julio De Vido se coló ayer en la Cámara de Diputados, cuando en el marco del debate en particular sobre la ley de responsabilidad penal algunos integrantes de la bancada de Cambiemos pidieron que se trate el desafuero del legislador del Frente para la Victoria. Sin embargo, el asunto no pasó de lo testimonial porque hasta tanto el juez federal Luis Rodríguez no haga lugar al peculiar pedido del fiscal Carlos Stornelli para indagar, desaforar y detener al ex ministro de Planificación Federal el Congreso no puede expedirse sobre su situación. Así lo confirmó el propio presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, ante el requerimiento del jefe del bloque del FpV-PJ, Héctor Recalde. “Me dijo que no había recibido ningún requerimiento de ningún juez”, confirmó Recalde luego de la sesión.
El jefe de la bancada del FpV-PJ sostuvo que no corresponde desaforar ni detener a un diputado sin sentencia firme en contra excepto que haya peligro de fuga o de destrucción de pruebas, por lo que ese mecanismo no correspondería aplicarse en el caso de De Vido. Sin embargo, agregó que igual podría suceder porque existe “un hostigamiento de jueces y fiscales” contra quienes hayan formado parte del gobierno de Cristina Kirchner. “Cada vez que hay elecciones se agudiza la persecución”, denunció el jefe del bloque que responde a la ex presidenta.
Además, Recalde estimó que quienes buscan el desafuero de De Vido no conseguirán los votos necesarios para aprobar ese trámite en caso de que sea requerido por el juez. “Para nosotros el principio es la libertad. No hay razones para que esté detenido, porque no puede alterar la recolección de pruebas y no hay una sola vez que no se haya presentado” ante la justicia, evaluó. “Creo que no juntan los dos tercios, pero en la cancha se ven los pingos”, completó sobre la movida del oficialismo.
A pesar de que formalmente no existían hasta ayer motivos para que la Cámara trate el asunto –incluso si el juez solicitara que se le quiten los fueros, hay un plazo de 240 días para que los legisladores se aboquen al tema–, ayer el oficialismo planteó la cuestión en el recinto como si fuera de extrema urgencia provocando el rechazo de distintos bloques opositores, incluso el del Frente Renovador, que suele acompañar a Cambiemos en la mayoría de sus iniciativas contra el kirchnerismo.
“Parte de la política no quiere activar los mecanismos para salir de la impunidad”, aseguró el diputado de la Coalición Cívica Fernando Sánchez, acusando a la oposición de bloquear el supuesto tratamiento del desafuero de De Vido. “Si la Justicia no llama y los otros cubren, acá van a pasar años hasta que pase algo. El pueblo argentino se los va a agradecer, no estamos entregando a nadie más que a los que cometieron actos de corrupción”, dijo el lilito Sánchez, quien iba como candidato en la lista de Vamos Juntos en la Ciudad pero luego fue designado para ocupar un cargo en la jefatura de Gabinete.
Por su parte, el titular del bloque de Cambiemos, Nicolás Massot, dijo que “sería alarmante y escandaloso que ante un pedido de la Justicia haya una defensa corporativa” de De Vido. Sin embargo, también le puso paños fríos a la situación al advertir que “lo más importante es que el juez acepte el pedido del fiscal” porque “si no hay un juez dispuesto en avanzar en la causa en general o en la detención, sería bastante inútil también hacer una votación en el Congreso”.
De Vido no formó parte de la sesión de ayer. Aunque está en Buenos Aires y el martes había asistido al Congreso, en el bloque del FpV-PJ decidieron preservarlo por considerar que su presencia en el recinto podía afectar la estrategia opositora para desbaratar el artículo 37 de la ley de responsabilidad empresarial que impulsaba el oficialismo.