La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) redujo de 3000 a 1000 dólares la cantidad de plata que los argentinos podrán gastar en compras online de productos en el extranjero con envíos a Argentina. Aplica para servicios "puerta a puerta" de correo privados (courier), y productos de hasta 50 kilos. La medida rige desde este viernes.
A partir de hoy, los envíos que ingresen a través del Régimen de Importación por Prestadores de Servicios Postales PSP/Courier, destinados a personas humanas o jurídicas - es decir, aquellas compras que los y las argentinas realizan de manera online para uso personal, luego pagan con tarjeta de crédito, Paypal o Western Union, y finalmente las reciben a través de un servicio de correo privado- no pueden excederse los 1000 dólares incluyendo costo de mercadería, seguro y flete.
Además del tope en el monto, el envío tiene que pesar hasta 50 kilos, se pueden ingresar hasta tres unidades de una misma especie y no puede tener finalidad comercial. Los límites de peso y de unidades no se modificaron. "Esta medida se adopta por razones de oportunidad, mérito y conveniencia en materia de política económica", asegura la resolución general que publicó hoy la AFIP y lleva la firma de su titular, Carlos Daniel Castagneto.
"Como consecuencia del fortalecimiento de acciones de control y fiscalización ejecutadas en los distintos regímenes de importación, entre ellos el Régimen de Importación por Prestadores de Servicios Postales PSP/Courier, se detectaron irregularidades las cuales derivaron en denuncias infraccionales y/o penales, según el caso, circunstancia que evidencia la necesidad de adoptar medidas tendientes al debido resguardo de la renta fiscal", explicó la AFIP en los considerandos del comunicado y agregó que " dentro del escenario económico actual y a fin de evitar la desnaturalización del régimen en trato, deviene necesario la actualización de los valores FOB vigentes".
En el caso de solicitar la exportación, la normativa definió que el valor FOB (con seguro y flete incluido) para este tipo de mercadería se mantiene con el tope de 3000 dólares para cada remitente del envío. De esta forma, se retrotrae el tope de envíos del sistema al que poseía al lanzarse en agosto de 2016, el cual había sido incrementado posteriormente a 3.000 dólares en 2019.
Esta reducción en los límites se hace en un contexto donde el Gobierno analiza medidas para disminuir la salida de dólares por gastos turísticos y compras en el exterior. Es que el equipo del ministro Sergio Massa está monitoreando el déficit de la balanza turística, que alcanzó 750 millones de dólares mensuales a julio y se espera que pueda incrementar para la época del mundial y las vacaciones de verano.
Entre las medidas que se evalúan se encuentran el aumento del recargo de ganancias sobre el dólar tarjeta, que actualmente es del 45 por ciento; directamente desactivar la devolución de ese porcentaje de retención de ganancias tanto para dólar ahorro de 35 por ciento como dólar tarjeta; o fijar un tipo de cambio diferenciado para gastos en el exterior que se asimile al dólar MEP, que hoy se encuentra en 306 pesos por dólar.
Puerta a puerta
El uso de este tipo de servicios de pequeños envíos personales de mercaderías desde el exterior creció particularmente en los últimos años con el aumento del comercio electrónico. En la actualidad, el régimen permite realizar solo cinco de estos pedidos al año.
Los productos que pueden comprarse son alimentos y bebidas, prendas de vestir, juguetes, productos tecnológicos, objetos de decoración, entre otros. La condición es que sea mercadería para uso personal y no comercial, que no pese más de 50 kilos y que el valor total de la operación no supere, a partir de hoy, los 1000 dólares.
Para pagar este servicio de compras en el exterior, los clientes deben contar con medios de pagos específicos autorizados como la tarjeta de crédito o la adhesión a sistema PayPal, DineroMail, Western Union, entre otros. A su vez, es necesario contar con CUIT y clave fiscal de AFIP con nivel de seguridad 3, como mínimo.
No es la primera vez que este segmento de importaciones personales se encuentra bajo la mira del ente recaudatorio. A mediados de mayo, la administración tributaria modificó la normativa que regula este canal para ingresar mercadería a la Argentina por avión, con el objetivo de “restringir la posibilidad de realizar maniobras fraudulentas”.