El Gobierno de Chile aceptó este jueves a la noche la renuncia del jefe del Estado Mayor Conjunto, Guillermo Paiva, después de que se filtrara información de las Fuerzas Armadas del país a través de un hackeo.
Así lo informó la ministra de Defensa chilena, Maya Fernández, que anunció además una investigación sumaria y la presentación de antecedentes a la Justicia militar. "La ministra Fernández informó que el Gobierno aceptó la renuncia del jefe del Estado Mayor Conjunto, general de División Guillermo Paiva", puntualizó un comunicado difundido a última hora de este jueves por el Ministerio de Defensa chileno.
La funcionaria indicó que instruyó una investigación sumaria administrativa al interior del Estado Mayor Conjunto, a la vez que pidió al Ministerio Público Militar que asuma la representación del Ministerio de Defensa en las investigaciones que correspondan. "En horas de esta mañana nos reunimos con los comandantes en jefe de las tres ramas de las Fuerzas Armadas para realizar un balance de cómo este robo de información afecta la defensa del país", detalló Fernández. Mientras tanto, la ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, se refirió al hackeo y a la renuncia de Paiva, y afirmó que hay una investigación en curso, pero hay una responsabilidad de mando en algo que pasó.
Asimismo, la ministra que ejerce como vicepresidenta de Chile por el viaje al exterior del presidente Gabriel Boric, fue crítica con el Estado Mayor Conjunto, que no informó sobre la filtración de correos en el momento que ocurrió, y solo habló de una situación de vulnerabilidad de seguridad. “La filtración no estaba comunicada ni en el Ministerio ni a ninguna autoridad fuera del Estado Mayor, lo que estaba avisado es que había vulnerabilidades en la seguridad”, señaló Tohá en entrevista con el canal chileno Chilevisión.
El diputado de Acción Humanista Tomás Hirsch, miembro de la Comisión de Defensa de la Cámara, manifestó en conferencia de prensa estar conforme con la renuncia. Hirsch dijo que era lo menos que se podía esperar después de este escándalo, sobre todo si es verdad que este general estaba al tanto de esta filtración y no le informó al Ejecutivo.
En tanto, desde la oposición, Miguel Ángel Becker, diputado de Renovación Nacional, se mostró a favor de la investigación, ya que va a permitir investigar a fondo la situación de los correos electrónicos. Sin embargo, Miguel Mellado, diputado del mismo partido político, fue más crítico y solicitó saber la responsabilidad de la ministra de Defensa.
El exministro de Defensa del segundo periodo de Michelle Bachelet, Jorge Burgos, calificó esta situación como súper sensible y de suma gravedad, pero descartó en base a los antecedentes una responsabilidad directa o indirecta de la ministra de Defensa. "Creo que sería aventurado decir una cosa así", dijo Burgos en T13 Radio en referencia a la posible responsabilidad de la ministra en la filtración de mails.
El hackeo
El pasado martes, medios chilenos informaron que un grupo de hackers filtró más de 300.000 correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto que contenían comunicaciones, documentos sobre gastos así como de algunas operaciones de las Fuerzas Armadas durante el Estado de Excepción Constitucional que se llevó a cabo en las regiones del Bío Bío y La Araucanía, durante la administración del expresidente Sebastián Piñera, informó Bio Bio Chile.
De acuerdo con los documentos filtrados, se desprende por ejemplo que la Armada y el Ejército de Chile desembolsaron, entre octubre de 2021 y abril de 2022, más de 1.200 millones de pesos chilenos.
La filtración obligó a la ministra de Defensa a regresar a Chile con urgencia desde Nueva York, donde acompañaba al presidente de la República, Gabriel Boric, en la Asamblea general de la ONU y forzó el jueves la salida del jefe del EMCO, general Guillermo Paiva. “Frente a los hechos conocidos en relación con la falla de seguridad de los correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto, el Presidente de la República ha instruido a la ministra de Defensa Nacional retornar al país para liderar la respuesta frente a estos hechos”, comunicaron desde el Gobierno chileno.
Junto con entregar los antecedentes a la justicia militar para impulsar una investigación penal, el Ejecutivo instruyó un sumario administrativo para determinar las responsabilidades correspondientes. El Congreso, en tanto, tomó cartes en el asunto y su comisión de Defensa Nacional citó a la secretaria de Estado junto al subsecretario y el jefe del EMCO, con el fin de dar cuenta de los alcances de la filtración.
No es la primera vez que se producen en democracia investigaciones por delitos relacionados con el enriquecimiento ilícito en la cúpula del Ejército chileno, una práctica que según los historiadores estaba muy arraigada durante la dictadura de Augusto Pinochet, que gobernó de facto el país vecino entre 1973 y 1990. Desde el retorno a la democracia, comandantes en Jefe del Ejército chileno como Humberto Oviedo, Juan Miguel Fuentalba y Óscar Izurieta han sido vinculados a fraudes millonarios y por delitos de corrupción.