Ofelia Fernández, legisladora porteña del Frente de Todos, cuestionó este miércoles a la ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, por "ningunear" a les estudiantes que mantienen tomas en al menos 11 establecimientos educativos, y denunciar a sus familias, en vez de ofrecer respuestas concretas a las demandas planteadas por la comunidad educativa.
"Acuña ofrece denuncias a los padres, ninguneos a los estudiantes, policías apretando, pero 0 respuestas a los problemas que le plantean: ni a las viandas basura, ni a los techos que se caen, ni nada. Sos ministra de educación hermana, resolvé algo o hacete panelista", publicó en Twitter Fernández, quien hace más de 5 meses presentó un proyecto para transformar el sistema de alimentación escolar.
El proyecto presentado por Fernández apunta a ofrecer a las y los estudiantes un menú saludable que cumpla con las condiciones nutricionales de cada etapa de la vida. "Hoy en jardines, primarias y secundarias la comida intoxica y es de pésima calidad. Hay un negocio con comedores y viandas que condena de hambre a quienes capaz en la escuela hacen su única comida del día", denunció la legisladora al momento de impulsar la iniciativa.
Cuando la diputada porteña presentó el proyecto, el Gobierno de la Ciudad gastaba $37 en el desayuno de cada estudiante. Ese aporte alimentario muchas veces consiste en un paquete de galletitas de agua y una chocolatada. En tanto, los alimentos ofrecidos para las meriendas son mayormente sánguches de paleta y queso, tal como puede observarse en la imagen que compartió este miércoles la legisladora del Frente de Todos Maru Bielli.
Toma en escuelas porteñas
El viernes pasado, estudiantes del Mariano Acosta decidieron tomar el establecimiento en rechazo a la implementación, de forma inconsulta, de las prácticas profesionales para alumnos y alumnas de quinto año por parte del Gobierno de la Ciudad.
La medida también se tomó por la decisión dispuesta por la cartera que dirige Soledad Acuña para que las y los docentes trabajen los sábados, por la falta de inversión edilicia que pone en riesgo la integridad de docentes y estudiantes, y por la escasez y mala calidad de las viandas.
Con el correr de los días, se fue elevando la cantidad de colegios ocupados por las y los estudiantes y este miércoles eran al menos 12 los establecimientos tomados:
- Escuela Normal Superior Lenguas Vivas Sofía Esther Broquen de Spangenberg.
- Escuela Superior Especializada en Cerámica N° 1.
- Escuela Federico García Lorca.
- Colegio Mariano Moreno.
- Escuela Superior de Educación Artística en Artes Visuales Rogelio Yrurtia.
- Escuela de Música Juan Pedro Esnaola.
- Escuela Rodolfo Walsh.
- Colegio Nicolás Avellaneda.
- Liceo 5 Pascual Guaglianone.
- Colegio Osvaldo Pugliese.
- Escuela de Comercio Carlos Pellegrini, la primera institución que no depende de la Ciudad de Buenos Aires sino de la Universidad de Buenos Aires (UBA), que se sumó anoche a las protestas.
- El Colegio Nacional de Buenos Aires, dependiente de la UBA, tendrá asambleas en todos los turnos para "discutir la situación del colegio y todos los de CABA".
Lejos de apostar al diálogo, el Gobierno porteño respondió por la vía de la intimidación a las familias y la judicialización del conflicto: después de anunciar que había iniciado acciones penales contra padres del Mariano Acosta, el procedimiento se repitió en algunas otras escuelas tomadas, con notificaciones a las familias, inclusive a cargo de la Policía de la Ciudad, asistiendo en patrulleros a los domicilios particulares, según denunciaron familias de colegios como el Lengüitas, el Lorca y el Liceo 5.