La recaudación impositiva en septiembre ascendió a 2,13 billones de pesos, lo cual supone un incremento del 117 por ciento interanual. El ingreso de recursos a las arcas del Estado nacional estuvo impulsado por la fuerte liquidación de las exportaciones de soja, que explotaron gracias al régimen de tipo de cambio preferencial que rigió durante el mes, informó la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
De todos modos, si se exceptúa del cálculo de recaudación a los derechos de exportación, los ingresos tributarios de septiembre marcaron una mejora de 87,6 por ciento interanual, una variación incluso superior a la evolución que registró la inflación en similar período. Según los últimos datos del Indec, la suba de precios a nivel minorista registraba en agosto un 78,5 por ciento interanual.
La recaudación acumulada hasta el cierre del tercer trimestre muestra un aumento nominal del 77 por ciento, también por encima de la inflación, que hasta agosto marcó un 56,4 por ciento. Son datos positivos para el tablero de comando de la macroeconomía, que maneja Sergio Massa y que mira de reojo el FMI. La cartera de Economía remarcó que "los impuestos que otorgan progresividad al sistema, se expandieron en conjunto un 104,9 por ciento".
De la mano del dólar soja
Durante el noveno mes del año, los tributos de comercio exterior mostraron un crecimiento del 349,8 por ciento. En particular, los ingresos por Derechos de Exportación registraron una suba de 489 por ciento respecto a septiembre del 2021, al acumular un monto de 434.033 millones de pesos.
Semejante incremento de la recaudación por retenciones se explica por la liquidación récord de la cosecha de soja, movilizada por los beneficios del acceso al dólar preferencial de 200 pesos, por encima de la cotización oficial. Según los datos oficiales, el complejo sojero liquidó un total de 8123 millones de dólares totales en septiembre. Fueron unas 13,7 millones de toneladas por parte de más de 44 mil productores, entre personas jurídicas y físicas.
Por otro lado, la recaudación asociada a los derechos de Importación y tasa estadística, en conjunto registraron un incremento del 71,3 por ciento interanual. A diferencia de las retenciones sobre las ventas externas, los impuestos a las importaciones se perjudican por las restricciones que pesan sobre estas operaciones, en el marco del esquema que mantiene el Gobierno para "cuidar los dólares".
Mercado interno
Entre los impuestos asociados a la marcha del mercado interno, el impuesto a las Ganancias registró un crecimiento del 110 por ciento interanual, mientras que el Impuesto sobre los Bienes Personales lo hizo en un 47,2 por ciento.
El IVA, que marca el termómetro del consumo, tuvo una suba anual del 84,9 por ciento interanual, mientras que el impuesto a los Créditos y Débitos lo hizo en un 90,1 por ciento. Por su parte, el impuesto PAIS, que opera sobre las compras de dólares para atesoramiento y viajes al exterior, registró un avance del 358,4 por ciento, por el crecimiento del turismo emisivo, la suba de la alícuota y del tipo de cambio.
En cuanto a los recursos de la Seguridad Social, en total marcaron un avance nominal del 81,7 por ciento. "Se sostuvieron altas tasas de crecimiento, profundizando la tendencia expansiva observada en los últimos meses. Tanto las mejoras salariales como el crecimiento del empleo registrado persisten como los factores que explican dicha expansión", consideró el Ministerio de Economía. La suba de dichos recursos responde al crecimiento de las contribuciones patronales (83,9 por ciento) y al incremento de los aportes personales (79,3 por ciento).