En 2023, por primera vez en la historia de Brasil, la Cámara de Diputados sumará a sus bancas a dos mujeres transgénero. Se trata de Erika Hilton, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), y Duda Salabert, del Partido Democrático laborista (PDT), quienes resultaron elegidas en los comicios de este domingo, según los resultados oficiales difundidos este lunes.

Erika Hilton, concejala en la ciudad de Sao Paulo, y Duda Salabert, concejala en Belo Horizonte, la capital del estado de Minas Gerais, obtuvieron 257.000 votos y 208.000 respectivamente

"Son dos personas que estaban en cargos electivos y ahora pasan para un cargo de mayor importancia en el Parlamento federal, donde van a continuar levantando las banderas que las eligieron, pero también legislando en beneficio del pueblo brasileño", destacó Keila Simpson, presidenta de la Asociación Nacional de Travestis y Transexuales (Antra).

Para Simpson, los resultados de este domingo fueron producto de una campaña "extremadamente intensa" y de muchas batallas durante el proceso. La democracia "está ahí para ser respetada", celebró en ese sentido.

Quiénes son Erika Hilton y Duda Salabert

Hilton, de 29 años, es una activista por los derechos de las personas negras y del colectivo LGBT que fue criada en una familia conservadora que la expulsó de su casa a los 14 años, lo que la llevó a vivir en la calle, donde ejerció la prostitución

Inició su carrera política en 2015, tras una disputa con una empresa de transporte público que se negó a imprimir su nombre femenino en un pasaje de colectivo. Con la repercusión del caso, Hilton ganó reputación como defensora de los derechos trans y fue invitada por el Partido Socialismo y Libertad a afiliarse en sus filas en 2016.

En 2020 lanzó su candidatura a concejala en São Paulo, donde fue elegida con 50.508 votos, convirtiéndose en la concejala más votada de Brasil y la primera mujer trans en ocupar un escaño en el Concejo Municipal de São Paulo. 

Salabert, de 41 años, es una profesora de literatura y política brasileña que se convirtió en 2018 en la primera persona transgénero en postularse para el cargo de Senadora de la República.​ En 2020, fue elegida concejala, siendo la más votada en la historia de Belo Horizonte, con el 11,9% de los votos en una lista de 41 candidatos.

Entre sus principales preocupaciones figura el cuidado del medioambiente: cuando fue elegida concejala prometió plantar 37.000 árboles, uno por cada voto recibido, y en estas elecciones llevó a cabo la primera campaña “cero basura” de la historia, sin usar panfletos, banderas, o pegatinas. 

En los últimos años, recibió numerosas amenazas de muerte, por lo que este domingo decidió votar usando un chaleco antibalas.

Otros cargos

En los comicios del domingo también resultó electa, pero como diputada estatal en Río de Janeiro, la primera profesora trans de la Universidad Federal de Río de Janeiro, Dani Balbi (PSOL), quien quedó en el puesto 20 con 65.782 votos. 

Además, fueron elegidas tres diputadas regionales transgénero en los estados de Sergipe, Río de Janeiro y Sao Paulo, en este último caso como parte de un colectivo.

Desafíos

Para Simpson, la participación política de la población trans por primera vez en el Congreso supondrá una "dura batalla" por los resultados del Senado, dado que buena parte de sus nuevos miembros son de una ideología "religiosa y fundamentalista".

"Si bien el saldo es positivo, las elecciones nos remiten a un cuadro de angustia muy fuerte por la forma como quedó establecido el Parlamento y especialmente el Senado, por cuenta de algunos senadores que fueron elegidos y que son personas que no consiguen convivir con la diversidad que tenemos en Brasil", señaló.

Este año, el número de postulantes trans que aspiraban a un cargo de elección popular batió un récord en Brasil, con 76 candidaturas, un 44 % más que las registradas en 2018, según datos de Antra.