“Nick Cave canta, Iggy Pop estelariza, y los animales ganan”, cacarea la afamada organización PETA (People for the Ethical Treatment of Animals) sobre su más flamante coalición: la que reúne al crooner reflexivo, la iguana del punk y los bichitos en general, juntos para arengar –como el nombre de la orga indica– por el buen trato animal. A través de un adorable cortometraje recientemente lanzado, que bajo el eslogan “Sé la persona que tu perro piensa que eres”, cuenta el cuento de un Iggy Pop fornido, animado, que salva a un zorro de una trampa fatal (usando su micrófono, arma de muchos filos), a una tortuga de ser atropellada (deteniendo el tránsito con sus pasitos característicos), a peces en alta mar. Mientras, de fondo, se escucha la voz de Cave entonando “Breathless”, un tema del disco Abattoir Blues / The Lyre of Orpheus (2004), cuyo uso ha cedido por la causa y para la ocasión. Así, cuando Nick tararea “El conejo se esconde bajo el suelo porque está indefenso sin ti”, el descamisado Pop rescata a una pobrecita liebre de los piedrazos de un malvado, ahuyentando al truhán a sandiazo limpio. Y el conejo, chocho de contento, choca los cinco con su salvador punk-rock... Apenas una de las varias escenas que integran el encantador video, dirigido por el fotógrafo musical Robert Sebree, que finiquita la historia volviendo a seres de carne y hueso, develando que todo había sido un sueño del perro de –sí, sí– Iggy Pop, sonado superhéroe del can. Y el responsable de “Lust for Life” (más “Candy” que “Search & Destroy” en el clip) le hace mimo a su mejor amigo y continúa leyendo One Can Make a Difference, de Ingrid Newkirk, cofundadora de PETA. Más redondo, echale un compás.