La canciller alemana, Angela Merkel, reconoció ayer que los debates llevados a cabo durante la primera jornada de la cumbre del G 20 no sirvieron para limar diferencias y acercar posturas en relación a la política climática. En una comparecencia ante la prensa, la mandataria recalcó que la mayor parte de los jefes de Estado y de gobierno del Grupo de los Veinte reconocieron la importancia de implementar el Acuerdo del Clima de París. “Lamentablemente, Estados Unidos ha anunciado que abandona el pacto y por supuesto que esto juega un papel importante”, agregó. Los jefes de Estado y de gobierno preparan una formulación inaudita de la tradicional declaración final en la que todos mostrarán su apoyo en la defensa del clima y se recogerá la disidencia de Washington en este punto. Previamente, el jueves, la canciller alemana mantuvo un encuentro bilateral con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. La reunión se produjo mientras persiste el malestar causado por las acusaciones del líder turco al gobierno de Merkel, al que acusó de tener “prácticas nazis” por haber impedido mítines de sus ministros frente a la comunidad turca en suelo alemán. Por su parte, Alemania retiró a sus soldados de una base turca ante la reiterada prohibición de Ankara a que les visitaran grupos de diputados del Parlamento federal.
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