La puja salarial del gremio colectivero a nivel nacional, frente al reclamo empresario de conseguir más subsidio estatal o aumentar tarifa, y la renuencia del gobierno nacional a conceder tales pretensiones derribó el frágil equilibrio que el servicio mantuvo hasta ayer. Y en la audiencia sostenida entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Federación Argentina de Transportadores por Automotor (Fatap) no hubo humo blanco. Las partes se mantuvieron en sus trece y por lo tanto el sindicato a nivel nacional anunció un paro de 48 horas que se cumplirá hoy y mañana en todo el país, menos para el área de privilegio, el conurbano bonaerense, AMBA. Y la seccional Rosario del gremio adhiere esta vez al planteo de UTA nacional: no circulan líneas urbanas, interurbanas y de media distancia hasta 200 kilómetros de trayecto.

"Esperábamos algún tipo de acuerdo pero eso no sucedió, así que ratificamos las medidas de fuerza. El pedido es de recomposición salarial del 35% de aumento, tal como ya firmaron los trabajadores de Ciudad de Buenos Aires y AMBA", expuso ayer el secretario general de UTA Rosario, Sergio Copello, en conferencia de prensa luego de que la audiencia paritaria en Buenos Aires se cayera sin solución. 

La exigencia gremial es de 35% de aumento para estos tres meses que restan del año, con el fin de empardar la paritaria de UTA en las seccionales del AMBA, del 80% anual. 

"El gobierno nacional dice que los responsables son los gobernadores, y estos dicen que es el gobierno nacional. Pero lo único que queda es que hasta ahora en el interior nos consideran trabajadores de segunda. Allá cobran en tiempo y forma, y acá parece que no hay voluntad política de transformar esa realidad", se quejó el representante de los choferes de ómnibus.

El problema de base es el mismo de siempre: el reparto desigual del monto que el gobierno nacional asigna para subsidiar el servicio de transporte de pasajeros. Mientras las empresas del AMBA acaparan el 87% del total, unos 295.621 millones de pesos al año, o 24.633 millones por mes, en el resto del país se reparten el 13% restante, unos 3.850 millones de pesos mensuales.

"Esto es el comienzo de la lucha: empieza con 48 horas de paro, luego serán 72 horas, y por supuesto que si no hay arreglo será paro por tiempo indeterminado. Es una posibilidad", advirtió Copello. Y rechazó la queja empresaria que la Fatap puso en la mesa, acerca de la intransigencia del Ministerio de Transporte en repuntar la masa de subsidios o autorizar un nuevo aumento de tarifas. 

"Los trabajadores le pedimos la recomposición a la patronal, los empresarios, y estos tienen que pedirle a los responsables políticos, que no nos tiren la pelota a nosotros. Lo único claro es que el sistema de transporte no funciona si al trabajador no le alcanza el sueldo para vivir", plantó.

En un comunicado emitido ayer por la tarde y firmado por el titular nacional Roberto Fernández, UTA aludió a los usuarios del servicio: "Agotamos todas las instancias de negociación previas a esta medida de fuerza con el fin de no perjudicar a los 9 millones de usuarios diarios de nuestros servicios, pero nos niegan el acuerdo (...) Exigimos igual remuneración por igual tarea", señaló el sindicato en alusión a los trabajadores del gremio en el área de privilegio. 

Ayer desde Fatap reiteraron que "el transporte de pasajeros en el interior está en emergencia "por el fuerte incremento de los costos, y fundamentalmente por el retraso en la actualización de las tarifas y compensaciones al sector". Y compararon: "En el AMBA, por cada colectivo los ingresos llegan a 1,4 millones de pesos, y apenas a 300 mil pesos en el interior”, a pesar de que “los costos de las operaciones por kilómetro” son “exactamente iguales”.

Al mismo tiempo que trabajadores y patrones pujaban en la audiencia, el ministro nacional de Transporte, Alexis Guerrera, exponía en la Cámara de Diputados su presupuesto para 2023. En esa exposición estimó que en diciembre subirá la tarifa del transporte público en CABA y conurbano, en el orden del 40 por ciento, por lo que el boleto de colectivo allí se irá a poco más de 35 pesos, todavía muy por debajo de los 85 pesos que pagan rosarinos y cordobeses, y los 95 pesos que pagan los marplatenses por cada viaje.

Guerrera fue a Diputados a defender su capítulo en el proyecto de ley del presupuesto que envió el Ejecutivo nacional, que le asigna 748.507 millones de pesos.