El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció en las últimas semanas recortes en el presupuesto nacional. Tras reducir el aporte financiero a las universidades públicas, esta semana se oficializaron "modificaciones" en el presupuesto de Ciencia y Tecnología, al que le sacaron 616 millones de reales (100 millones de dólares aproximadamente) que estaban destinados a actividades de investigación y divulgación.
La decisión afecta a decenas de proyectos esenciales para el avance científico y tecnológico del país en diversas áreas. Entre ellas, se recortaron 30 millones de reales para el “Fomento de Proyectos Institucionales de Investigación en el Sector Salud”, y el área de "Fomento de la Investigación y Desarrollo en Áreas Básicas y Estratégicas", sufrió una disminución de alrededor de 177 millones de reales.
Incluso las áreas que el gobierno de Bolsonaro consideraba prioritarias sentirán el golpe. El "Fomento de Proyectos Institucionales de Investigación en el Sector de Agronegocios" fue recortado en más de R$ 27 millones, mientras que el "Fomento de Proyectos Institucionales de Investigación en el Sector de Petróleo y Gas Natural" fue víctima de un recorte de R$ 88 millones.
El profesor Fernando Cássio, de la Universidad Federal de ABC, explicó que las nuevas medidas afectan directamente el funcionamiento de las actividades de investigación en las universidades públicas, que son responsables del 95% de la producción de ciencia y tecnología del país.
“Tomaron de un lado para dárselo al otro. Recortaron de las universidades para pagar deudas, y ahora sacan del presupuesto del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Se están llevando todo el dinero destinado a la investigación e infraestructura”, indicó el investigador.
“Con una mano toma y con la otra da, y con el agravante de que, en este caso específicamente del Ministerio de Ciencia y Tecnología, el presupuesto no vuelve, el presupuesto ya lo perdimos”, lamentó.
“Esa es más o menos la lógica del tope de gasto, poner las áreas a pelear por el recurso. Es muy grave, las universidades siguen siendo directamente afectadas”, agregó.
Bloqueo al presupuesto educativo por aumento del gasto público
El presidente de Brasil bloqueó la semana pasada el dinero del presupuesto destinado a las universidades para hacerle frente al déficit en las cuentas públicas.
"El bloqueo de las cuentas del presupuesto educativo coloca en riesgo el sistema de todas las universidades federales e institutos federales", informó la Asociación Nacional de Dirigentes de Instituciones Federales de Educación Superior, Andifes.
El bloqueo total del presupuesto 2022 del Ministerio de Educación llega a 3.000 millones de reales, el 28,6% del recorte total. El decreto 11.216 fue firmado el viernes 30 de septiembre por el presidente Bolsonaro y el ministro de Economía, Paulo Guedes, dos días antes de la primera vuelta de la elección presidencial.
Los detalles del decreto llamado de reprogramación presupuestaria se conocieron mediante el análisis hecho por la Institución Fiscal Independiente del Congreso, que indicó que el recorte presupuestario del Poder Ejecutivo fue de 10.500 millones de reales, unos 2.000 millones de dólares en total.
Los demás ministerios que recibieron recortes después de Educación fueron Ciencia y Tecnología, Salud, Desarrollo Regional y Defensa.
"El gobierno sigue con problemas de gestión presupuestaria por haber gastado por encima del techo del gasto público e incluso después de haber incluido en la cuenta los juicios contra el Estado que logró postergar", dijo Vilma Pinto, directora del Instituto Fiscal Independiente.
La Unión Nacional de Estudiantes denunció que "el gobierno federal confisca el saldo de todas las cuentas de la educación superior y no envía dinero ni para el mantenimiento de los edificios".