Luego de cuatro días de protestas sin la llegada de funcionarios al lugar al cruce de Pichanal, en el norte salteño, referentes de las distintas comunidades del norte provincial decidieron comenzar ayer lo que denominaron como la Segunda Marcha Histórica de las comunidades originarias y, según lo decidido en asamblea, su intención es llegar hasta la Casa Rosada en Buenos Aires.
Así lo manifestó ante Salta/12 el presidente de la Unión Autónoma de Comunidades Originarias del Pilcomayo (UACOP), Abel Mendoza, luego de una noche y un día agitados por la amenaza de una posible represión.
La situación llegó al fiscal federal de Orán, José Luis Bruno, quien envió agentes del organismo a su cargo para hablar con las comunidades. Esto fue luego de que se hubieran establecido cortes de hasta 12 horas sobre la ruta nacional 34, en el cruce de la localidad de Pichanal, en el deparamento Orán, en reclamo de respuestas del gobierno provincial a sus reclamos por accedo al agua segura, educación, salud y viviendas.
Si bien funcionarios de la provincia afirmaron que se propuso llevar a algunos de los referentes de la protesta a Salta Capital para iniciar un diálogo, lo único que se vió ayer en la ruta fue el masivo arribo de policías de Infantería preparados para una eventual represión.
No se llegó a ese punto dado que a media mañana, y antes de iniciar cualquier corte, los referentes indígenas decidieron salir caminando en dirección sur. Si bien primero indicaron que iban a ir a Salta Capital, luego se aclaró que una vez que lleguen a General Güemes, a unos 50 kilómetros de la ciudad de Salta, decidirán si su marcha evita la principal ciudad de la provincia, y sigue a Buenos Aires hasta llegar a la Casa Rosada.
La decisión de ir a la Capital Federal se tomó en una asamblea que se realizó ayer. Pero Mendoza explicó que las asambleas se hacen recurrentemente a diario, por lo que las decisiones pueden variar.
Hasta ayer los seguía un móvil policial y “nadie de la Policía Vial” para resguardar la seguridad de los marchantes. “Esto muestra lo ausente que está el Estado”, dijo Mendoza al indicar que pasarían la noche en Colonia Santa Rosa (también de Orán), para volver hoy a la caminata.
“Hacemos un llamado en este mes de luto desde 1492 (año que españoles pisaron el continente), y convocamos a la reflexión”, dijo Mendoza al sostener que es necesario este ejercicio ante la ausencia del Estado nacional y provincial, combinada con “persecución”. “Sabemos que exponer así nuestra vida es un riesgo. Pero ya estamos atravesando ese riesgo. Ellos son los generadores de este conflicto”, añadió.
“Hay mucho de contenido partidario”
El delegado de Asuntos Indígenas de la provincia, Marcelo Córdova, fue sindicado como el vocero del gobierno de Gustavo Sáenz para hablar sobre el conflicto.
En diálogo con Salta/12, el funcionario afirmó que pese a las consideraciones de los manifestantes sobre la falta de cumplimiento de las promesas de Sáenz en 2020 (cuando se hizo la primera marcha histórica), la provincia está cumpliendo.
Detalló que se hicieron “siete pozos de agua” desde el proyecto Bosques Nativos y Comunidad de la Dirección Nacional de Bosques. “Todos están funcionando” afirmó al sostener que además se están realizando las obras de interconexión para abastecer a las comunidades. Añadió que Santa Victoria Este, el municipio del departamento Rivadavia, que cuenta con la mayor cantidad de población originaria, “es el lugar con más camiones aguateros en toda la provincia”. Admitió que por ahora los tres camiones del Ejército Argentino, instalados en el puesto El Rosado para llevar agua a las comunidades indígenas de esa zona, son los únicos que no están en movimiento por un conflicto con los propietarios del lugar.
Al ser consultado sobre las razones que generan la reacción de las comunidades, y los diversos reclamos que se hacen desde distintos lugares del norte provincial por falta de agua, salud, caminos, entre muchos otros temas, afirmó que “hay mucho de contenido político partidario”. Sin embargo, no mencionó de quién vendría la intención de apoyar la protesta políticamente.
El funcionario añadió que desde el lunes último se ofreció a los manifestantes poner vehículos para que unos 15 referentes se dirijan a Salta Capital para hablar con el gobierno “y las mujeres puedan volver a las casas”. Los manifestantes rechazaron esa posibilidad y solicitaron que alguien con poder de decisión (como el gobernador u otros funcionarios de alto rango) se presenten ante ellos como ocurrió en noviembre de 2020. Ayer Córdova indicó que no hay manera de hacer lugar a ese pedido.