El ATP 250 de Nápoles, que debía comenzar este sábado, se vio envuelto en una insólita polémica. Los ocho primeros partidos de clasificación del torneo de tenis italiano debieron suspenderse porque la pelota no picaba lo suficiente como para disputar un encuentro profesional.
“Por problemas relacionados con el material utilizado para la construcción de las canchas por parte de una empresa líder en el sector en el mundo, por lo que por causas ajenas a la organización, fue necesario aplazar los partidos de clasificación”, destaca la publicación en redes sociales del Tennis Club Napoli, espacio encargado de albergar el evento.
En ese sentido, mientras la empresa a cargo de la superficie de las canchas -que según aclaran en el comunicado es ‘líder del sector a nivel mundial’ - trabaja para tratar de superar este contratiempo, los organizadores resolvieron mudar los partidos al Tennis Club de Pozzuoli, que se jugarán a puertas cerradas.
“Los partidos de clasificación no se llevarán a cabo en las canchas del Club de Tenis de Nápoles. El torneo comenzará regularmente el lunes con el cuadro principal. Las entradas vendidas para hoy y mañana podrán ser reembolsadas o reprogramadas para el lunes, a elección del cliente, para la sesión diurna o vespertina”, aseguraron desde la organización. “Pedimos disculpas por las molestias”, concluyó el comunicado.
Uno de los tenistas que tiene previsto participar en el ATP 250 de Nápoles es el argentino Sebastián Báez, quien aprovechó la estadía para visitar el pintoresco Barrio Español de la ciudad.
El jugador recorrió las características calles estrechas napolitana y hasta tuvo tiempo para tomarse una foto junto a su entrenador Sebastián Gutiérrez, con el emblemático mural de fondo de Diego Maradona. “Simplemente D10S”, publicó en Instagram el tenista.
