Goles, golazos, un crack por lado y patadas, muchas patadas. Sarmiento y San Lorenzo animaron un partidazo este lunes en Junín que terminó 4 a 2 para la visita, que se destapó ofensivamente como no lo había hecho en toda la Liga: por caso, había hecho cuatro goles en sus últimos nueve partidos.

El choque era un mano a mano para seguir con vida en la carrera hacia la Sudamericana, con ambos equipos con 52 puntos en la tabla anual. Con la goleada, el que se ilusiona es San Lorenzo, que quedó a tres de Estudiantes, el último en meterse a la Copa.

La velada fue tomando temperatura por lo que estaba en juego y la floja labor del árbitro Espinoza, que ayudó a calentar bandos. Reflejo de esto fue el cruce entre los habilidosos Pata Castro y Perrito Barrios, con patadón de este último.

Finalmente, entre las pisadas elegantes del de Sarmiento y los enganches endiablados del de San Lorenzo, el que prevaleció fue el Perrito, que terminó con dos asistencias y el rótulo de figura del encuentro.

Malcom Braida, reinventado como lateral izquierdo por el DT Insúa, abrió la cuenta con un sobrio remate de derecha desde afuera del área que se desvió en el defensor Guanini y descolocó al buen arquero de Sarmiento, Sebastián Meza.

Al rato el local llegó al empate con un centro frontal del Pata Castro -con mucho efecto, algo que repitió durante buena parte del juego- que Gondou conectó de cabeza. A los 41, el que apareció para la visita fue Vombergar tras un lindo pase tres dedos de Barrios y colaboración del arquero Meza. Mientras que cuatro minutos después, el Perrito volvió a encarar y cedió con Bareiro, que con un disparo rasante puso el 3 a 1.


En la segunda parte San Lorenzo aseguró la historia con fórmula repetida: disparo de Braida y desvío en Guanini. Evidentemente no era la noche de Sarmiento, que de todos modos llegó al descuento con un desborde y centro de Gallardo para la llegada de Quinteros.