La exinterventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, reveló que hallaron fotos de Elisa Carrió en las oficinas del organismo. Además, Caamaño advirtió otra vez por la avanzada del lawfare en la Argentina y afirmó que si Juntos por el Cambio regresa al Gobierno en 2023 se volverá a montar un esquema de espionaje ilegal hacia opositores. “A nivel justicia estamos en el subsuelo”, afirmó Caamaño.
La declaración de Caamaño toma mayor relevancia luego de que este fin de semana, la exdiputada de la Coalición Cívica revelara maniobras de espionaje de las que fue víctima durante la gestión de Cambiemos.
"Sufrí mucha persecución, pero nunca tanta como parte de sectores de mi propio gobierno", confesó. “El daño que le hicieron a mi familia fue irreparable”, añadió Carrió, al tiempo que aclaró que fue algo “terrible" que ya “se superó”.
Sin entrar en detalles, debido a que el caso está bajo investigación, aseguró que "el canciller (Jorge) Faurie fue parte de eso” y recordó las diferencias que la separan del resto de sus compañeros de Juntos por el Cambio. “Somos los únicos que pedimos la eliminación de la AFI”, aseguró Carrió.
“Yo creo que la deben haber seguido a Carrió. Encontramos algo en un momento, que fue ese viaje que hizo a Paraguay. Eso estaba en la agencia. No me consta que investigaran a su hijo. Pero sí encontramos un parte de que había viajado a Paraguay”, puntualizó Caamaño sobre la última de las denuncias reportadas sobre el tema.
Los sótanos de la democracia
Para reflejar este sistema, definido por el Presidente Alberto Fernández como “el sótano de la democracia”, Caamaño puso un ejemplo: en los primeros días al frente de la AFI, allá por 2019, los espías se reportaban con ella para explicarles las tareas de seguimiento interno que estaban haciendo, y cuando les ordenaron finalizar esas actividades, renunciaron.
“El macrismo se dedicó, utilizando a la AFI, a hacer espionaje ilegal. Fue prácticamente lo único que hicieron. Todo lo que encontramos lo pusimos a disposición de la justicia. Hicimos diez denuncias. Algunas por administración fraudulenta, pero la mayoría por espionaje ilegal”, añadió la exinterventora del organismo, que fue sucedida meses atrás por Agustín Rossi.
Por eso, para Caamaño no cabe duda de que en caso de imponerse en las elecciones el macrismo, este mismo sistema de espionaje ilegal volverá a montarse: “Si gana Macri la AFI volverá a ser un lugar de espionaje. Lo lleva encima. Lo hizo cuando fue jefe de Gobierno. No puede existir sin hacer espionaje. Siguió a organizaciones sociales y periodistas. No le hace asco a nada”.
En este seguimiento sistemático a funcionarios, periodistas y sindicalistas, entre otros, hay muchos referentes de la propia coalición amarilla. Entre “los propios” que salieron al cruce por esta situación en las últimas horas está el neurocientífico radical, Facundo Manes, y la líder de la Coalición Cívica y socia fundadora de Cambiemos, Elisa Carrió.
Este no es un tema menor para Caamaño, que vincula este tema con la calidad democrática del país: “Tenemos un Poder Judicial que no da justicia. La corporación judicial se dedica al lawfare, no a impartir justicia, que es para lo que debería estar. Esto puede incluir a la causa que investiga el atentado a la vicepresidenta”.