¿Puede el ser humano ser recordado por llevar a cabo grandes hazañas? Efectivamente. Y nadie registra mejor la superación de los límites de la humanidad que el Guinness World Records, el famoso y peculiar libro que reúne algunos de los hechos más extraordinarios de la naturaleza con una amplia diversidad de capacidades y cualidades humanas. Pero ¿en qué medida la ciencia participa en estos récords? ¿Cuál es la mejor forma de pasar a la historia y lograr una marca Guinness? Desde la Agencia de noticias científicas de la UNQ lo repasamos.
Para el norteamericano George Frandsen, la mejor manera de ser recordado fue y sigue siendo coleccionar heces fosilizadas. La marca en el famoso libro la logró gracias a su museo particular que reúne un total de 1.277 piezas, recogidas en 15 estados de EEUU y ocho países diferentes. La joya de su colección es Precious, con un peso de 1,92 kilos, encontrada en Carolina del Sur y que fue expulsada por un cocodrilo de 6 metros en el Mioceno, hace más de 5 millones de años. De esta manera, su colección de heces se convirtió en la más grande que, hasta el momento, el mundo pudo registrar.
La piel más elástica
Pero los Guinness más científicos de la historia no terminan ahí. El caso de Garry Turner también pasó a la historia de estos récords. El hombre es capaz de estirar la piel de su estómago hasta una longitud distendida de 15,8 centímetros debido a una rara condición médica llamada síndrome de Ehlers-Danlos, un trastorno de los tejidos conectivos que afecta a la piel, los ligamentos y los órganos internos. Esta condición hace que el colágeno que refuerza la piel demuestre su elasticidad, lo que provoca, entre otras cosas, un aflojamiento de la piel y una “hipermovilidad” de las articulaciones. En los casos más graves, puede generar el colapso o la ruptura mortal de los vasos sanguíneos.
El maestro del arte submarino
A la piel más elástica, se le suma otro récord donde lo científico dice presente. Es el que obtuvo Jason de Caires Taylor, un artista británico que tiene el récord de mayor cantidad de instalaciones artísticas bajo el agua: 12 instalaciones con cientos de esculturas individuales. Taylor creó el primer museo submarino del mundo, el Museo Subacuático del Arte en la costa Cancún y el primer parque de esculturas submarinas en Grenada, considerado una de las 25 maravillas del mundo por National Geographic. Este artista trabaja junto a biólogos marinos para colocar sus esculturas en lugares estratégicos que ayuden a generar nuevos arrecifes de coral artificiales. La idea es que desvíen la atracción turística de los arrecifes naturales para así ayudar a que estos puedan regenerarse.
Los ojos más saltones
Siguiendo la línea científica, el caso de la norteamericana Kim Goodman no deja de impactar al mundo: sus ojos salen de sus órbitas hasta una distancia de 1,2 centímetros, un valor certificado por un oftalmólogo. Luego de sufrir un golpe en la cabeza, Goodman comenzó a sufrir exoftalmia, una condición médica que impulsa los ojos hacia fuera de las órbitas y que, normalmente, está ligada a alguna patología. Lo extraño, es que ella logra controlarlo a voluntad.
La temperatura más alta de la Tierra
Otro dato impactante que registra este libro es la temperatura más alta de la que existe un registro fiable. El 10 de julio de 1913 en Greenland Ranch, en el Valle de la Muerte situado en California, Estados Unidos, se midieron 56,7 grados. Las máximas en este lugar alcanzan una media de 46 grados. Sin embargo, años más tarde, la tierra se recalentó. Y el 15 de julio de 1972 se midió en el suelo una temperatura de 93,9 grados, casi lo suficiente para hacer hervir el agua.
La persona más joven en lograr fisión nuclear
Con tan solo 12 años, Jackson Oswalt también entró al libro Guinness por construir un reactor nuclear en su casa. De esta manera, se convirtió en la persona más joven en lograr la fisión nuclear, al construir una máquina de acero que consta de un vacío, una bomba y diferentes compartimentos que podrían romper átomos de alta temperatura que liberan energía de fisión. La máquina, que cuenta con materiales de unos 10 mil dólares, es capaz de producir un alto nivel de energía.
El video más visto de un influencer científico
La sorprendente hazaña de lanzar un globo para captar imágenes inéditas en la estratósfera, realizada por el influencer científico colombiano Faber Burgos Sarmiento, el 26 de septiembre de 2020, lo hizo merecedor de récord Guinness. El joven incorporó una cámara al globo para tomar las fotografías que, posteriormente, publicó en redes sociales. El logro de figurar en el libro de Récord Guinness lo alcanzó porque su video, donde explica cómo elevó el globo hacia la estratosfera, es el más visto en la red social Facebook.