Desde Santa Fe
El Senado aprobó ayer el último presupuesto del gobierno de Omar Perotti y la ley impositiva con una diferencia de tres minutos y la giró de inmediato a la Cámara de Diputados. A las 18.04, sancionó la “ley de leyes” -como la llamó la vicegobernadora Alejandra Rodenas- y a las 18.07, la política tributaria, ambas para 2023. Las dos salieron por unanimidad en la votación en general, aunque el bloque de los siete radicales se abstuvo en cuatro artículos del presupuesto y uno de la ley impositiva. La media sanción exprés marcó otro contraste en el arranque de Perotti que en 2020 -en plena pandemia- tuvo que gobernar con un presupuesto armado por su antecesor Miguel Lifschitz, aprobado antes de que llegara a la Casa Gris, y en 2022, la ley quedó varada durante meses en Diputados –también por el bloque de Lifschitz- hasta el 10 de marzo último. En el final de mandato de Perotti, el presupuesto de 2023 es por una cifra inédita: un billón 800 mil millones de pesos de recursos, un poquito menos de gastos y un superávit de 2.100 millones. “Una fuerte inversión de casi 300.000 millones de pesos lo que implica un incremento del 150% respecto a la de 2022 y un 81% de inversión real directa en obras y bienes de capital y casi el 16% en transferencia de municipios y comunas”, enfatizó el senador Alcides Calvo, jefe del bloque Lealtad que responde al gobernador. Su colega Rubén Pirola agregó otro dato: en 2023 se incorporaron los primeros 25.000 millones de pesos –en títulos públicos- del juicio ganado a la Nación, que Perotti cobró el lunes cuando firmó con el ministro de Economía Sergio Massa la transferencia a Santa Fe de 151.783 millones por la deuda histórica.
En una sesión de elogios mutuos, Calvo, Pirola –que habló en nombre de su jefe político Armando Traferri- y el líder del bloque de la UCR Felipe Michlig coincidieron en ponderar el canal de diálogo con el ministro de Economía Walter Agosto y su equipo técnico. Michlig anunció que los radicales votarían el presupuesto y la ley impositiva en general, pero se abstendría en cuatro artículos de la primera y uno de la segunda, en la votación en particular. “Una actitud pro positiva”, la calificó.
Pirola agradeció a Michlig por el “trabajo que pudimos hacer en estos quince días” desde que Perotti envió los proyectos al Senado. Esto “demuestra la responsabilidad” de oficialistas y opositores en “tratar cada uno de los asuntos” y el “amplio consenso” entre los 19 senadores: los seis alineados con Perotti, los seis que responden a Traferri y los siete radicales.
El segundo de Traferri enfatizó lo del primer billón de la historia de Santa Fe. El presupuesto es por “un billón 800 mil millones de pesos”, en “estos tiempos de una economía difícil”. Y marcó el contraste con el gobierno de Alberto Fernández al que el partido de Mauricio Macri dejó sin presupuesto en 2022. En la provincia parecía que iba a suceder lo mismo, pero finalmente el Frente Progresista votó la ley el 10 de marzo, después de un cajoneo de tres meses.
La media sanción de ayer –dijo Pirola- “refrenda la institucionalidad” de Santa Fe y el “respeto que señala nuestro presidente de bloque (Traferri) en la identidad de cada uno de los senadores en la defensa de los santafesinos”. En diciembre de 2019, en el primer presupuesto del gobierno de Perotti, que le armó Lifschitz para 2020, el Senado lo votó en 48 horas y Diputados completó la sanción antes de que el gobernador asumiera en la Casa Gris.
Ayer, Pirola ponderó “algunos números” de la inversión para el año que viene: el programa de Obras Menores (7.000 millones de pesos), Boleto Educativo (5.700 millones) Boleto Educativo Rural (2.200 millones), Billetera Santa Fe (triplica los recursos), Plan Incluir (7.500 millones), caminos de la ruralidad (3.300 millones). “Y una partida muy importante para el transporte de pasajeros que aumentó de 3.600 millones en 2022 a 8.600 millones en 2023”, agregó.
Calvo dijo que “este 20 de octubre tenemos el sano orgullo de votar dos leyes fundamentales” para el último año del mandato de Perotti. Y coincidió con Pirola en la cautela de las pautas macroeconómicas: un crecimiento del PBI del 2% porque “la actividad económica de Santa Fe creció más que la media nacional” y “una inflación estimada del 60%”.
“Lo más importante del presupuesto 2023 –insistió Calvo- es la fuerte de inversión de casi 300.000 millones de pesos lo que implica un incremento del 150% respecto a 2022 y 81% de inversión real directa en obras y bienes de capital y casi el 16% en transferencia a municipios y comunas”. “La partida para el Ministerio de Educación supera el 21% del presupuesto, el Ministerio de Seguridad 14%, el Ministerio de Salud casi un 10% y un 6% en obras públicas para el Ministerio de Infraestructura. “Esto muestra claramente las prioridades del gobierno de Perotti”, concluyó Calvo.
