El gobernador bonaerense Axel Kicillof estuvo en la reunión de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, CAME, junto a la Federación Económica de Buenos Aires, FEBA, en Mar del Plata. El gobernador hizo un llamado a cuidar el mercado interno y el nivel de vida de los consumidores. "Lo fundamental es mantener vigoroso el consumo y la demanda agregada, porque en caso contrario la producción nacional empieza a desfallecer", señaló Kicillof en la jornada de cierre del encuentro empresarial.
La Argentina, "como el resto del mundo", atraviesa "condiciones absolutamente novedosas", y "lamentablemente el mundo está en medio de un verdadero terremoto", sostuvo. "Un marco internacional de pandemia seguida de guerra nunca se había vivido". En ese sentido, destacó la necesidad de alcanzar el autoabastecimiento energético y "salir del esquema de déficit energético importador".
Además, llamó a los empresarios a "sostener un modelo de crecimiento, pero no basado únicamente en la exportación de recursos naturales, sino además en la industria, la producción y el mercado interno". "Ustedes como empresarios pymes, como principal empleadores del país y de la provincia, son un actor fundamental", indicó, y consideró "de interés general que haya un mercado interno más robusto", para "darle un grado de mayor de sostenibilidad" a la recuperación post pandemia.
Kicillof cuestionó la "apertura importadora" de la gestión de Juntos por el Cambio, y la "ausencia de crédito" de entonces para el sector productivo. "Lanzamos líneas de crédito y pusimos Banco Provincia al servicio de la producción", expresó el mandatario, quien estuvo acompañado por el ministró de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica provincial, Augusto Costa.
En el panel de cierre participaron además como anfitriones Camilo Alberto Kahale, presidente de FEBA; el presidente de la Came, Alfredo González, y Blas Taladrid, de la Unión del Comercio, la Industria y la Producción marplatense. González se refirió a la necesidad de "interactuar entre lo público y privado y entre la dirigencia gremial y empresaria"; y definió a las pymes como "el motor de la economía real". Tras sostener que "todo nos cuesta más", desde "conseguir financiamiento del sector bancario privado, como conseguir insumos", aseguró que, pese a indicadores "relativamente positivos", ciertas "indagaciones cualitativas, nos relacionan con un futuro un poco incierto" y, en ese sentido, mencionó "la necesidad de tener una macroeconomía más estable que la que tenemos actualmente".