Este miércoles por la madrugada la Cámara de Diputados aprobó en general el proyecto del Presupuesto 2023. La media sanción se logró con 180 votos a favor, 22 en contra y 49 abstenciones.
Uno de los artículos más discutidos en el texto, que proponía que los jueces, fiscales y trabajadores del Poder Judicial comiencen a tributar el Impuesto a las Ganancias, fue rechazado con el aporte de los votos de la izquierda, Juntos por el Cambio, Avanza Libertad y algunos legisladores de extracción sindical del Frente de Todos.
En AM750, la diputada oficialista María Rosa Martínez justificó su voto negativo: "La redistribución pasa por otras cosas, por la rentas rurales ociosas o derogar la ley de entidades financieras", señaló.
Según Martínez, los votos que aportó el oficialismo para rechazar este artículo no incidieron en el resultado final: "La votación estaba perdida, la oposición votó en contra. Nuestra contribución no hizo perder recaudación al Estado", argumentó, en Branca De Vuelta.
La legisladora del Frente de Todos sostuvo además que el Impuesto a las Ganancias "se ha ido distorsionando en el tiempo", porque originalmente alcanzaba al 10% de los trabajadores. Sobre este punto, planteó que la iniciativa rechazada en el Congreso "genera una conflictividad innecesaria con los trabajadores del Poder Judicial" porque afecta "aproximadamente al 95% de los judiciales y solo al 5% de los jueces".
Además, Martínez explicó que junto a los otros diputados de extracción sindical presentaron un régimen tributario progresivo que alcanzara a aquellos trabajadores que cobraran un básico de 500 mil pesos.
Y concluyó: "No nos parece que es el debate que hay que dar. Todos los trabajadores, a partir de un sueldo que garantice la condición de vida, tienen que poder pagar Ganancias. Y ese debate lo queremos dar con todos los trabajadores, no solo con los judiciales".
