Tres activistas de la organización ecologista Just Stop Oil fueron detenidos después de que uno de ellos se pegara la cabeza al vidrio que protege el cuadro "La Joven de la Perla", de Johannes Vermeer, en el Museo Mauritshuis de La Haya, en Países Bajos, para denunciar la falta de medidas contra el cambio climático. Otro de los activistas pegó su mano a la pared al lado del cuadro.
Esta organización es la misma que, semanas atrás, había arrojado sopa de tomates contra el cuadro "Los Girasoles", de Van Gogh, en el Museo de la Galería Nacional de Londres, y días más tarde arrojó tortazos contra la estatua de cera del rey Carlos III, en el museo de Madame Tussauds en la misma ciudad.
Cómo fue la acción de los activistas
Dos jóvenes se acercaron al lienzo del pintor barroco Vermeer cuando uno de ellos, que parecía estar escribiendo algo en el vidrio que protege el lienzo, apoyó la cabeza y mostró un pegamento. Mientras, otro activista le arrojaba -muy cerca del cuadro- el contenido de una lata de tomates. Finalmente este otro joven se pegó la mano al lado del cuadro, luciendo sus remeras con la inscripción "Just Stop Oil".
Esta vez eligieron otro clásico de la pintura universal, como la obra también conocida como “Muchacha con turbante” o la “Mona Lisa neerlandesa”. En todos los casos, las pinturas estaban protegidas por un cristal y no sufrieron daños.
Este jueves, el museo Mauritshuis explicó que "hacia las 14 (hora local), dos personas se pegaron al cuadro", en tanto "una tercera lanzó una sustancia desconocida" sobre la obra.
“¿Cómo te sientes al ver algo tan bonito y valioso, siendo aparentemente destrozado ante tus ojos? Nos sentimos indignados. Este cuadro está protegido por un cristal. Está bien, pero la gente vulnerable alrededor del planeta no está protegida. El futuro de nuestros hijos no está protegido. Las personas en extrema pobreza tienen que elegir entre calentarse o comer, y no están protegidos”, alegó uno de los activistas, con la mano pegada al lado del cuadro.
La policía de La Haya dijo en Twitter que había detenido a tres personas en un museo por "violencia pública contra bienes".
Otras acciones contra obras de arte
No es la primera vez que Just Stop Oil realiza una acción de protesta de este tipo. Además de las protestas contra "Los girasoles" y la estatua del rey Carlos III, en junio, dos militantes se "pegaron" al marco de la obra "Pescadores en flor", de Vincent Van Gogh, expuesta en Courtauld Gallery, de Londres.
En tanto, la semana pasada, activistas alemanes de otra organización, "Letzte Generation” (“Última generación”), habían lanzado puré de papas contra un cuadro de Claude Monet expuesto en el Museo Barberini de Potsdam, cerca de Berlín.
Qué es Just Stop Oil y qué reclama
La historia de Just Stop Oil es corta, pero ruidosa. Nació en febrero de este año como —según explican en sus redes sociales— una coalición de grupos que trabajan juntos con un objetivo: "Garantizar que el gobierno se comprometa a poner fin a todas las nuevas licencias y permisos para la exploración, el desarrollo y la producción de combustibles fósiles en el Reino Unido".
"La evidencia científica es inequívoca: el cambio climático es una amenaza para el bienestar humano y la salud del planeta. Cualquier retraso adicional en la acción global concertada, implicará perder la breve ventana para asegurar un futuro habitable", señalan.
Por ello, los activistas llevan a cabo una campaña para exigir el fin de los proyectos de petróleo y gas y realizan acciones públicas —como los tortazos a la estatua del rey Carlos III— para llamar la atención de los medios de comunicación, difundir su mensaje y recaudar fondos.
"Permitir la extracción de nuevos recursos de petróleo y gas en el Reino Unido es una política obscena y genocida que matará a nuestros hijos y condenará a la humanidad al olvido. Solo tiene que parar", afirman.
Asimismo, denuncian que el gobierno "está habilitando activamente la industria de los combustibles fósiles a través de subsidios obscenos y exenciones de impuestos para la extracción de nuevos combustibles fósiles".
El grupo apunta que se deriven "los subsidios gubernamentales de los combustibles fósiles sucios hacia energía, transporte y aislamiento limpios". Y llama a la población a unirse a su lucha: "Es hora de dejar todo a un lado, vamos a la resistencia contigo o sin ti. ¿Eres espectador o te vas a levantar?", sostienen los activistas.