La vicepresidenta, Cristina Kirchner, recibió en su despacho del Senado al responsable internacional de exploración y producción de Chevron, Clay Neff, y al encargado para la región de la compañía estadounidense, Bruce Niemeyer. Los representantes de la petrolera llegaron junto al presidente de YPF, Pablo González.
Cristina recordó la asociación que Chevrón realizó con YPF durante su gestión para el inicio de la explotación en Vaca Muerta. "Con Chevron realizamos la primera asociación internacional luego de la recuperación de YPF, que permitió una estratégica inversión para el desarrollo de Vaca Muerta", destacó la vicepresidenta y agradeció a la petrolera "por seguir confiando e invirtiendo en nuestro país".
Aquel acuerdo entre YPF-Chevrón, cerrado entre fines de 2012 y 2013, había despertado una polémica por contar con una cláusula de conficialidad, que llevó a la judicialización del caso y a la entrega de la documentación. La firma estadounidense se había comprometido a través de aquel acuerdo a desembolsar unos 1275,6 millones de dólares.
El trato se cerró un día después de que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner oficializara por decreto un nuevo régimen de promoción de inversiones petroleras. Aquella norma establecía que las empresas interesadas en desembolsar al menos 1000 millones de dólares en un proyecto hidrocarburífero podrían comercializar sin retenciones el 20 por ciento de lo producido a partir del quinto año de iniciada la inversión y además dispondrían libremente de las divisas generadas por la exportación de dicho porcentaje de crudo o gas.
Si bien era un decreto para el conjunto de la industria, tuvo como claro destinatario a la compañía estadounidense que a partir de entonces comenzó a desembolsar el dinero. A ese monto inicial, en 2014 le sumó 670 millones de dólares, el año pasado otros 640 millones y en el primer semestre de este año 215 millones, lo que implicó un desembolso total de 2800 millones de dólares en tres años.
En septiembre de 2016, el entonces vicepresidente de Finanzas de YPF, Daniel González, explicó a un grupo de medios, entre los que estuvo convocado PáginaI12, los detalles de aquel acuerdo y señaló que el punto clave del acuerdo firmado en julio de 2013 fue la estructura de sociedades que participaron para “blindar”, según las palabras de González, los desembolsos de Chevron de los riesgos que suponían los fondos buitre, el juicio en Ecuador contra Chevron y, en menor medida, potenciales reclamos de Repsol, a quien se le había expropiado las acciones que tenía en YPF y todavía no se la había indemnizado.