Se inauguró hoy en Olmos una parte de lo que será el complejo fabril más grande de América Latina dentro de un penal. Con más de 4000 metros cuadrados destinados a los rubros textil y carpintería, distribuidos en cuatro fábricas alojadas en las unidades 8 de Los Hornos, 32 de Florencio Varela y 1 de Olmos y 47 de San Martín, donde los internos fabricarán los componentes del nuevo plan Qunita.
Participaron el gobernador Axel Kicillof, el ministro de Justicia Julio Alak. el ministro de Salud Nicolás Kreplak, el de Trabajo Water Correa y el responsable del área educativa Alberto Sileoni. La iniciativa recibió el saludo y la felicitación del expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica. El plan fue elaborado conjuntamente por el Ministerio de Producción, que desarrolló la línea, la Comisión de Investigaciones Científicas que certificó la calidad, la Fundación Banco Provincia, que aportó maquinaria para carpintería, y las áreas de Trabajo y Educación, que crearon centros de formación específicos.
Alak destacó que “volvió el Qunita y esto forma parte del plan de transformación del sistema penitenciario”. Luego detalló “que el Sistema Penitenciario Bonaerense es mucho más grande que el nacional y es el tercero en la región, detrás de San Pablo y México DF". Agregó Alak: "Cuando asumimos, este sistema estaba en profunda crisis, dicho por la propia Cámara de Casación. Antes de asumir, Axel había elaborado un diagnóstico: sobrepoblación catastrófica, crisis humanitaria,. Durante la gestión anterior se incorporaron 16 mil internos y sólo 1040 plazas. Hubo que cancelar deudas millonarias con proveedores. La reincidencia era del 46 por ciento. Pusimos en marcha el plan de infraestructura penitenciaria más grande de la historia. Construimos en plena pandemia 15 hospitales en los penales".
“Tuvimos que transformar el servicio penitenciario de raíz, para cortar con el círculo de la reincidencia", afirmó el gobernador Kicillof. "Asumimos con un hacinamiento superior al 100 por ciento y hemos hecho una enorme inversión para bajar esa tasa. Algunos nos van a reprochar que invertimos en esto, pero mejorar las condiciones baja la reincidencia y mejora la seguridad", añadió. "Tenemos obras en marcha para sumar 12 mil plazas nuevas en un sistema que recibimos con 24 mil, trabajando en conjunto también con los intendentes.”
“La otra pata es el trabajo y la educación dentro de los penales, porque la tasa de internos que estudian y reinciden es mínima", dijo Kicillof. "Existía ya una formación en oficios, pero nosotros decidimos subir la apuesta. Nicolás Kreplak nos pidió que hagamos 90 mil cunitas anuales. Había que construir cárceles primero y después fábricas dentro de las cárceles. Hoy es una realidad.”