El Concejo reabrió el debate sobre la nocturnidad en Rosario, y esta vez con consenso suficiente como para derogar la ordenanza n° 7218 y sancionar una nueva, actualizada desde cero. Es que el marco jurídico vigente tiene ya dos décadas, y la noche algo ha cambiado, incluso pandemia mediante. 

La comisión de Gobierno empezó ayer a examinar y cotejar 5 proyectos sobre el tema. Dos proponen modificar la ordenanza actual, mientras que otros tres coinciden en dar vuelta de página y arrancar de cero. "Es que la norma actual induce a concebir una noche que ya no es tal, que ha cambiado, y entonces la discusión ya no pasa por si en un espacio de diversión nocturna se puede bailar o no. Pretender encasillar y clasificar por rubros no va más. La peña folclórica por ejemplo, hoy se ha ido reconvirtiendo. Los bares son pubs. Los restoranes también tienen música en vivo", señaló Caren Tepp, presidenta de la comisión.

Quienes impulsan las distintas iniciativas que se discutirán en lo que queda del año parlamentario son los bloques de Ciudad Futura, Todos Hacemos Rosario, UCR-JxC, y otra propuesta desde el oficialismo. 

En paralelo, se retomó el debate para no solo actualizar la reglamentación de bares, restaurantes y boliches. También apuntan a dar un marco legal a espacios culturales con el apoyo explícito del Estado local. "Que la oferta no sea solo gastronómica, el Estado debe promover y apoyar los escenarios de la ciudad que se han perdido, sobre todo durante la pandemia, y que son el capital simbólico de la cultura rosarina. Se trata de arribar a una ordenanza de consenso que permita habitar la noche, que recupere opciones de esparcimiento nocturno, y con un Estado promotor y de adecuado control", remarcó. 

León propone la creación de un "código de espectáculos públicos" para aggiornar el menú de propuestas con y sin baile, que incluya números artísticos en espacios cerrados y al aire libre. “La propuesta de rubros actual no alcanza porque los jóvenes se quedan en la calle, por eso proponemos incluir otros rubros como el del pub. En estos momentos estamos atravesando una situación económica muy dura que nos golpea, por eso hay que generar alternativas y conseguir el mejor modelo de nocturnidad para Rosario”, explicó la concejala radical.

En el debate surgió el problema extra de la falta de colectivos y taxis suficientes para garantizar una nocturnidad satisfactoria. Sumado a eso, la violencia y el delito. "Proponemos crear la figura del alcalde nocturno, que esté presente y los jóvenes no se sientan solos", agregó León. En su enfoque, sugiere encarar la nueva norma con "visión metropolitana" y no se agote en lo que suceda en el centro, Pichincha o la costa.

Jesica Pellegrini (Ciudad Futura) coincidió con la idea de crear un "alcalde nocturno", ya adoptada por varias ciudades. "Pero hay que salir de la versión reduccionista de la nocturnidad basada en la seguridad. En estos 20 años la ordenanza 7218 no promovió alternativas de actividades culturales. Esta es una oportunidad para instalar nuevos paradigmas y discutir el modelo de ciudad", asentó. En esa línea expresó que la ordenanza "debe abarcar a los barrios populares, garantizarle bienes culturales y alentar el criterio de responsabilidad".

Lisandro Cavatorta apuntó a crear "una zona de entretenimiento nocturno" en el afán de "lograr una noche democrática y sustentable para toda la ciudad". Esto es, "lograr un equilibrio entre el derecho de los empresarios a hacer sostenibles sus negocios, la generación de ambientes seguros y sanos, y el derecho a descansar”, de vecinas y vecinos, marcó.

Desde el mismo bloque, Julia Irigoitía promueve otra iniciativa con eje en "ordenar la actividad nocturna y la convivencia", y propone vincular la normativa en ciernes con la ley nacional 26.370, de Espectáculos Públicos. De esa manera, promover emprendimientos que incluyan a trabajadores de la cultura y el arte, y "lograr un equilibrio para garantizar el derecho al descanso" de quienes no participan de la recreación nocturna. De allí la idea de crear un "área de convivencia nocturna".

La peronista Silvana Teisa habló de "crear la licencia para regular a los establecimientos que quieran funcionar como bar o restaurantes con difusión musical y show en vivo, con o sin pista bailable", con definición de horarios de funcionamiento, entre otros puntos.

"Hay una necesidad de rever la nocturnidad pero no desde la restricción sino a partir de la incorporación de otras miradas, vinculadas a la cultura”, coincidió.

Además de esos tres proyectos de consenso, hay otras propuestas desde el oficialismo (María Eugenia Schmuck), de Susana Rueda y de María Fernanda Gigliani.

El debate seguirá miércoles de por medio, y continuará el año próximo con la reanudación del período ordinario del Concejo, cuando encaren un ciclo de audiencias públicas de consulta para sumar voces y opiniones a la nueva ordenanza por venir. 

"Esta vez, hay mayor consenso (que en 2018) porque ya no hay dudas de que la ordenanza vigente quedó obsoleta, para una ciudad que ya no existe", definió Tepp.