El presidente de Chile, Gabriel Boric, presentó el proyecto de reforma previsional que pone fin al sistema de pensiones creado en 1980 durante la última dictadura cívico militar de Augusto Pinochet.
“Lo que tenemos hoy en día en Chile es un sistema que administra tus ahorros y donde cada uno se salva como puede, pero en la vida y particularmente en los tiempos que corren todas y todos estamos expuestos a imprevistos, a situaciones que nos obligan a cambiar de rumbo, a recibir menos ingresos temporalmente”, afirmó Boric en referencia a las administradoras de fondos de pensiones (AFP) privadas.
El proyecto del mandatario chileno prevé la creación de un sistema previsional mixto “basado en los principios de la seguridad social en el que contribuyen el Estado, los empleadores y los trabajadores”.
“Las AFP, en esta reforma, se terminan; existirán nuevos gestores de inversión privados con el objeto exclusivo de invertir fondos previsionales y, además, existirá una alternativa pública, lo que permitirá promover la competencia con la entrada de nuevos actores”, precisó Boric, que además afirmó que el actual sistema de pensiones está en crisis.
Pensiones en crisis
“Las pensiones de hoy no alcanzan para que nuestros padres, madres, abuelos, abuelas sostengan una vida digna en su vejez sin importar cuánto trabajaron durante su vida”, afirmó el mandatario.
También advirtió que en Chile el 72% de las pensiones son inferiores al salario mínimo y que 1 de cada 4 jubilados recibe una pensión que está por debajo de la línea de la pobreza.
“Esto ocurre al mismo tiempo que las AFP perciben tremendas utilidades aunque los resultados y la rentabilidad de los fondos sean negativos”, denunció el jefe de Estado.
Seguro social y pensión universal
Según Boric, uno de los objetivos de la reforma previsional es subir el monto de las pensiones. “Esta reforma crea un nuevo seguro social que será financiado a través de una cotización a cargo de los empleadores que aumentará gradualmente hasta llegar al 6%, mejorando de esta manera las pensiones de todos y todas”, dijo el presidente.
"Los ahorros previsionales en las cuentas individuales mantendrán la propiedad individual, podrán heredarse y no serán jamás expropiados”, detalló Boric.
Boric también explicó que de aprobarse el proyecto de ley el nuevo monto que recibirán los jubilados mensualmente estará compuesto por tres pilares: uno que mantiene el sistema de capitalización individual a través de los aportes obligatorios de cada trabajador, otro aporte del seguro social (de 6%) de cargo de los empleadores y un tercero que es el aporte del Estado a través de la PGU (pensión garantizada universal). El mandatario indicó que la PGU será aumentado a 250 mil pesos chilenos (264 dólares).
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, explicó que cerca de un tercio de la recaudación de la Reforma Tributaria, que actualmente está en el Congreso, será para financiar el aumento de la PGU.
El proyecto de ley de Boric ahora deberá pasar al Senado y a la Cámara de Diputados donde se debatirá el texto que busca terminar con las AFP creadas en 1980 por el entonces ministro de Trabajo de Pinochet, José Piñera, hermano del expresidente Sebastián Piñera.
Desde el estallido social de 2019 la población chilena avanzó en los pedidos por mayor justicia social ante el aumento del costo de vida en el país.