El perdón como alternativa penal tuvo un nuevo ejercicio, esta vez en manos de un juez de Córdoba, cuando se dispuso absolver a dos jóvenes de 20 y 21 años, acusados de haber participado cuando eran menores de 18 años, en una pelea grupal en la que murió por los golpes uno de los participantes. La absolución surgió a partir del perdón que la madre de la víctima le concedió a los dos acusados.
El fiscal de juicio no acusó por entender que debe primar la resocialización de los dos jóvenes quienes habían pasado por un Instituto de Menores desde 2019, cuando se cometió el hecho.
El 13 de julio de 2019, en las instalaciones del Club Milka, en San Francisco, Córdoba, jugaron el equipo local con Los pibes de las Palmeras, por la Liga interprovincial. El partido se jugaba en la localidad de San Francisco y terminó a las piñas, entre los jugadores de ambos equipos y también ambas hinchadas.
En la pelea, Cristian Robledo fue asesinado por cinco jóvenes, tres de ellos mayores y dos menores de edad: los primeros terminaron con condenas de hasta 12 años de prisión.
Los dos menores de ese momento, hoy de 20 y 21 años, fueron trasladados al Complejo La Esperanza por el proceso penal juvenil. Ambos realizaron distintos cursos, incluso uno de ellos terminó la secundaria, y fueron revinculándose con sus familiares en salidas transitorias que les iban concediendo.
Desde el 30 de junio pasado contaban con permisos de salidas prolongados sin retorno al Instituto y cuando llegaron al juicio mostraron “arrepentimiento” por el hecho cometido.
El fiscal penal juvenil Alberione incluso tuvo en cuenta que en el juicio realizado, los dos acusados le pidieron “perdón” a la madre de Robledo y le aclararon que su intención no era matar a su hijo.
Ese perdón que concedió la madre de la víctima derivó en que el fiscal no formulara acusación. “Dado lo largo de este proceso, centrándonos en los jóvenes, y en virtud de los fines del Derecho Penal Minoril, que busca la no punición de los jóvenes, y resocialización, es decir que puedan volver a integrarse a la sociedad, pero respetando la persona humana y los derechos de los demás, solicito la absolución de pena de los jóvenes, creo que es la opción que mejor se ajusta a este momento", sostuvo el fiscal.
El juez Andrés Peretti al no tener acusación fiscal es que termina absolviendo a los dos jóvenes: “Hoy, el Fiscal solicitó que no les aplique pena y estoy obligado a obedecer”.
“Si bien el delito que cometieron fue gravísimo, la ley y el fiscal les da esta nueva oportunidad para no ir presos”, les advirtió.
El juez penal de Necochea Mario Alberto Juliano, fallecido sorpresivamente en octubre de 2020, fue el mayor mensajero de la idea del perdón como alternativa penal y de la mediación entre familiares de las víctimas y responsables del delito, dando un fuerte impulso a la organización Víctimas por la Paz.