Autoridades de Ecuador informaron que aumentaron a 18 los atentados reportados principalmente en dependencias policiales en tres estados, hechos que dejaron al menos ocho personas muertas, 28 detenidas, tras una serie de allanamientos. Los ataques ocurren en medio de una grave crisis de seguridad que atraviesa el país.

Tras conocerse los ataques el presidente Guillermo Lasso se instaló en Guayaquil para encabezar las operaciones, que incluyeron el traslado de más de 1.000 presos de la cárcel más grande del país, ubicada en esa ciudad, a otros penales.

Lasso convocó al Consejo de Seguridad Pública y del Estado, que integran el vicepresidente y las máximas autoridades de la Asamblea Nacional, la Corte Nacional de Justicia, la Secretaría Nacional de Seguridad Pública, de los ministerios de Gobierno, Defensa, Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.

En un primer momento, las autoridades habían reportado la muerte de cinco agentes policiales y más tarde informaron el fallecimiento de un hombre civil que recibió un balazo en la cabeza mientras estaba en la calle.

Allanamientos tras los atentados

"Las unidades técnicas y tácticas de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas realizaron varios allanamientos, obteniendo: 28 detenidos; ocho armas de fuego; 227 municiones; tres fusiles: 13 celulares; 600 sobres de sustancias sujetas a fiscalización: 60 cápsulas detonantes, ocho barras de dinamita ", informó el Ministerio del Interior.

Los allanamientos fueron en las provincias de Esmeraldas y Guayas, en las que ayer Lasso decretó el estado de excepción, aunque los ataques ocurrieron también en Santo Domingo de los Tsáchilas.

En el cantón Piñas, de la provincia de El Oro, fueron incautados en un camión 16.416 tacos de explosivos, 1.200 tacos de dinamita y 150.000 cápsulas detonantes, material que, según Interior, proviene de una fábrica de Perú. En este caso hubo dos detenidos.

Otros ataques

El ministro del Interior, Juan Zapata, informó a medios locales que el último atentando reportado en el sector de la Prosperina, en Guayas, dejó un policía herido y un sospechoso fallecido, y repudió el ataque a un centro de salud en el sector de Bastión Popular, también en Guayas.

"Son centros de paz; en un acto terrorista, personal médico y pacientes han sido atacados", señaló en declaraciones a la prensa.

El comandante general de la Policía Nacional, Fausto Salinas, confirmó que además de los cinco fallecidos había cuatro policías heridos como resultado de los ataques con armas de fuego. Dijo que adicionalmente se produjeron varios enfrentamientos en Durán y fueron capturadas ocho personas.

Las provincias de Esmeraldas y Guayas son escenarios de la actual crisis de inseguridad debido al enfrentamiento entre bandas, vinculadas al narcotráfico, al interior de las cárceles y en las calles.

Aparentemente, la serie de atentados se originó en la intención del Ejecutivo de trasladar a presos a otras cárceles.

La violencia en las cárceles, justamente, sumó nuevas víctimas: dos presos murieron y seis quedaron heridos durante enfrentamientos dentro del Centro de Privación de Libertad Regional no.1 de la provincia de Guayas.

Estado de excepción

Anoche, el mandatario firmó el decreto que estableció, por 45 días, un nuevo estado de excepción y toque de queda para las dos provincias más impactadas por la ola de atentados.

El ministro de Defensa, Luis Lara, informó de la llegada de un contingente militar para reforzar la seguridad en Guayaquil, para sumarse a los 1.400 que ya están en la zona.

“Esta violencia criminal está asociada al narcotráfico y al terrorismo y las Fuerzas Armadas están movilizándose para apoyar a la Policía”, aseguró Lara, reiterando la línea discursiva del Gobierno.

En ese contexto, 1.002 internos de la cárcel de Guayas, la prisión más grande de Ecuador, fueron enviados a otros penales, informó el Servicio Nacional de Atención a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI, servicio penitenciario).

“Los traslados se realizaron en dos grupos, el primero de 515 y el segundo de 487, dando un total de 1.002 personas privadas de libertad trasladadas”, precisó el SNAI en un comunicado.

Coches bombas

Hubo también otros atentados en Santo Domingo de los Tsáchilas, en los dos casos en estaciones de servicio en las que estallaron sendos coches-bomba.

En el mismo cantón, la Policía decomisó 108 armas, entre ellas fusiles, dentro de un vehículo, y el alcalde Wilson Erazo pidió al presidente Lasso incluir a la provincia en el estado de excepción.