El Ejecutivo municipal se apresta a enviar al Concejo su proyecto de Presupuesto 2023, sobre el que Pablo Javkin transitará su último año de gestión. Por imperio de la inflación, los números que definió el equipo económico duplican en lo nominal las cifras del presupuesto 2022. Pero aún así, en la intendencia destacan que la propuesta incrementa partidas en términos reales para áreas sensibles como salud y obra pública, y que aún así se mantiene un cálculo equilibrado entre ingresos y gastos: 147.879 millones de pesos, según deslizaron fuentes del municipio sobre el estimativo que Javkin prevé ingresar este lunes al parlamento local.
Lo que valoran en el gabinete es que este cálculo depara un ahorro en gasto corriente y reduce los servicios de deuda, que en este proyecto representa menos del 6% del global. Un funcionario consultado ayer ponderó lo que consideran cierta tendencia de saneamiento financiero, sin haber tomado en estos años adelantos de coparticipación ni prever esta vez renovación de deuda privada.
El cálculo se hizo sobre las previsiones que tomaron Nación y Provincia para sus respectivas estimaciones presupuestarias: crecimiento de 2% del PBI, inflación del 60% ("Es una meta, más que una posibilidad", tradujo la fuente), y un dólar oficial a $218.
El proyecto no depara aumentos aumentos puntuales de Tasa General de Inmuebles, DReI ni tarifas, más allá de los que le permiten al intendente las facultades conferidas por el Concejo. También hay incremento de partidas para Movilidad, en un año donde Javkin pretende reforzar el transporte urbano, implementar la tarjeta SUBE e intentar salir de la emergencia.
La variable que le ha permitido a Javkin trazar esta propuesta de gastos con cierto optimismo es el nivel sostenido de recaudación tributaria, que ha venido acompañando el ritmo inflacionario, y el valor de que el 50% de los recursos del municipio sean propios.
En esos términos, la administración Javkin prevé incrementar un par de puntos lo previsto para asistencia social. Hará que represente el 63% del gasto. Salud pública participará del 26% del presupuesto, a tono con la proporción de este año.
Sí proyecta el proyecto de ordenanza incrementos reales de partidas dentro del Plan de Reconstrucción, que abarca numerosas obras e intervenciones urbanas por unos $36.000 millones para pavimento, veredas, remodelación de avenidas y accesos, urbanización de asentamientos irregulares y cloacas. Se espera avanzar con la instalación de alumbrado público por LED en 35 barrios hasta cubrir el 70 por ciento de la ciudad.
Este diario pudo saber que el proyecto será ingresado el lunes al Concejo, para que en la sesión siguiente acudan representantes del Ejecutivo a exponerlo y evacuar dudas de los ediles.
En el primer piso del palacio municipal ayer comentaban con desdén la tardía autorización que emitió esta semana el Ministerio de Economía provincial a Rosario para que pueda emitir $2.500 millones en bonos públicos –algo que Javkin había pedido en mayo pasado– para pavimentar 400 cuadras. "Ahora esa plata cuesta más cara, paga menos cuadras de pavimento, y retrasa la obra. Si tuviéramos autonomía, como Córdoba, ya lo hubiéramos hecho", reprochó un funcionario.