El gobierno oficializó este jueves un nuevo aumento de tarifas para los usuarios de Edenor y Edesur que renunciaron al subsidio y que lo están perdiendo gradualmente. Para un cliente R1 de altos ingresos la nueva suba es del 30 por ciento y desde que se puso en marcha la segmentación en septiembre ya llega al 91 por ciento. El ajuste también alcanza a los hogares de ingresos medios que conservan el subsidio, pero consumen más de 400 kwh mensuales ya que lo demandado por encima de ese tope también está dejando de ser subsidiado de modo gradual.
El ajuste se desprende de las resoluciones 554/22 y 555/22 del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) publicadas este jueves en el Boletín Oficial. Pese a ello, el interventor del ENRE, Walter Martello sacó un comunicado en la tarde del jueves donde aseguró: “Desmiento de manera categórica un nuevo aumento en las tarifas del servicio público de energía eléctrica”. Allí afirma que los cuadros tarifarios publicados “obedecen a la programación estacional de los precios de la energía para el mercado mayorista a nivel nacional tal como sucede desde el año 1992”.
“Este proceso, que aparece ahora como una novedad, se realiza cada 1° de noviembre y forma parte de la reestructuración tarifaria normal y habitual que realiza la Secretaría de Energía de la Nación, y que este Ente aplica”, agrega luego en el mismo comunicado para terminar diciendo que “nada tiene que ver esta situación histórica y concurrente de todos los años con el proceso de segmentación dispuesto para las tarifas eléctricas”. Sin embargo, sus afirmaciones no coinciden con los cuadros tarifarios de las resoluciones que el propio funcionario firmó, donde el aumento está diferenciado de acuerdo a la segmentación tarifaria que se puso en marcha este año.
De hecho, si se compara el nuevo cuadro tarifario para los usuarios residenciales de Edenor Nivel 1, los que van a perder todo el subsidio, que figura en el anexo 1 de la resolución ENRE 554/22 y se lo compara con el cuadro tarifario del anexo 1 de la resolución ENRE 313/22, que estuvo vigente para los clientes de Edenor entre el 1 de septiembre y el 31 de octubre, puede verse que hay una suba en los cargos variables que componen la tarifa.
Por ejemplo, un cliente residencial R1 de ingresos altos, que consume hasta 150 kwh por mes, venía pagando un cargo fijo de 62,2 pesos y un cargo variable de 6,82 pesos y ahora seguirá pagando un cargo fijo de 62,2 pesos, pero pagará un cargo variable de 8,94 pesos, un 30 por ciento más alto. A su vez, si se compara con el cargo variable de 4,47 pesos vigente para un usuario R1 hasta el 1 de septiembre (resolución ENRE 171/22) la suba acumulada es de 100 por ciento.
Si ese usuario consume 140 kwh por mes, en junio pagaba 62,24 pesos de cargo fijo más 625,8 pesos de cargo variable, lo que arroja un total de 688 pesos. En septiembre pasó a pagar 62,24 pesos de cargo fijo más 954,8 pesos de cargo variable, lo que suma 1017 pesos. Es decir, un 47,8 por ciento más. Ese mismo usuario a partir de ahora pagará 62,24 pesos de cargo fijo y 1251,6 pesos de cargo variable. Es decir, 1313,84 pesos. Esta nueva cifra es un 29,2 por ciento más alta que lo que venía pagando hasta octubre y un 91 por ciento más de lo que venía pagando hasta el 31 de agosto.
Para los usuarios de menores recursos, agrupados en el Nivel 2, las resoluciones aclaran que continúan vigentes los precios de la energía establecidos en la resolución 629/22 de la Secretaría de Energía, pero el cuadro tarifario se modifica por el aumento del gravamen del Fondo Nacional de Energía Eléctrica. “Este aumento del gravamen produce en promedio un aumento del 3 por ciento para los usuarios residenciales”, agrega el ENRE.