El cuerpo sin vida de Claudio Soto (31) fue hallado en el Circuito de la Vida del parque Adán Quiroga con evidentes signos de violencia pasadas las 22 horas del sábado de 3 noviembre de 2007. A 15 años del violento homicidio, la Justicia de Catamarca no pudo determinar quién fue el autor del hecho y ni siquiera se arrestó a un o una sospechosa de haber cometido el crimen.
Las crónicas policiales de aquel entonces daban cuenta de que los hechos de los que la policía tomó conocimiento mediante un llamado telefónico anónimo, ocurrieron cerca del anochecer de ese día, cuando el actor concurrió al espacio público. El joven, cuyo presente lo encontraba liderando el grupo teatral Egocentric Us, con un gran futuro en lo actoral, como autor y como docente, murió a causa de un brutal ataque con arma blanca, que le dejó como saldo heridas cortantes en la zona del tórax, el abdomen, también en una de sus rodillas, la mano, la nuca, la espalda y la oreja.
En el lugar de los hechos, se tomaron más de una decena de declaraciones y se llevaron a cabo allanamientos, además de rastrillajes , en lo que fue una infructuosa búsqueda del arma homicida o pistas de cualquier tipo. Con el paso del tiempo, la investigación cayó en el olvido y nunca fue esclarecido.
El actor Rodolfo Berrondo, en diálogo con Catamarca/12, recordó a su amigo y director, expresando que “lamentablemente, fue uno de los tantos crímenes de la comunidad LGTBIQ+ que nunca se resolvió, le llamaron el crimen perfecto, pero eso no existe; sólo es que no se ha querido seguir preguntando”, opinó sobre las falencias de la investigación penal que se realizó con nulos resultados.
“Era un dulce de leche, querido por sus alumnos, enseñaba en el Carmen, en la Escuela de Teatro y tenía el grupo de teatro independiente con la que presentamos obras como La casa de Bernarda Alba, lo que fue una puesta hermosa, memorable”, expresó, a la vez que indicó que con esta agrupación, ganaron seis años consecutivos los provinciales de teatro y, de esta forma, llegaron a representar a la provincia en Capital Federal, con muy buena crítica.
“Su fallecimiento fue muy fuerte porque era muy querido por sus alumnos, también muy fuerte en el seno de la comunidad, además por ser un crimen horrible, con puñaladas por la espalda, a traición”, dijo, a la vez que se quejó por cómo la prensa de aquellos años abordó el tema. “Este crimen como que tenía otro tinte. En los diarios ponían como título que ‘el actor o director homosexual’ esto o lo otro. Daban detalles jugando con el morbo de la gente para vender dos diarios más”.
“Fue un espanto todo, el atropello tanto de la Justicia como de la prensa. ‘Si total, es un puto menos. Qué le hace’, faltaba que digan”.
El actor se refirió a las diferencias en el tratamiento informativo sobre noticias relacionadas a la comunidad LGTBIQ+ en la actualidad, y consideró que “ahora lo que ayuda son las leyes a favor de la comunidad, que dieron una mayor visibilidad. Los chicos salen con mayor derecho a la calle, porque en nuestra época, era pecado. Estaba muy mal visto y todo porque es una sociedad muy ligada a la Iglesia y muy hipócrita”, sostuvo.
Recordando a su amigo en esta fecha tan triste, Rodolfo dijo que “Claudio era un chico muy talentoso, estudiado y querido. También muy confiado, yo le decía que no pertenecía a este mundo”, lamentó, asegurando que fue una gran pérdida para Catamarca, tanto por su calidad de persona como por su aporte al teatro local y que la función gratuita que este sábado se presentará en el Complejo Urbano Girardi este sábado de la obra "Tengo tetas tengo pito y talento", será dedicada a él.
El joven actor y director de teatro, además de su importante trayectoria en espacios culturales de la provincia, se dedicaba a la docencia e impartía en la Escuela Provincial de Teatro Juan Oscar Ponferrada. También ejercía en el Colegio del Carmen y San José, en la Escuela Jorge Newbery y en la Escuela de Arte Vocacional, además de integrar la Comedia Municipal.
El crimen de Claudio es una de las cuentas pendientes de la Justicia de Catamarca con la sociedad en general y la comunidad LGTBIQ+ en particular, ya que pese a la violencia de su asesinato y la gran pérdida que esto implicó a nivel social, nunca se supo quién le quitó la vida y su muerte quedó completamente impune.