El Programa de Incremento Exportador, que durante septiembre pasado estableció un tipo de cambio diferencial de 200 pesos para la exportación de soja y derivados como harina, aceite y biodiesel, resultó un éxito. Marcó el máximo en 20 años para el ingreso de dólares para estos productos (8128 millones de dólares), y más de 16 millones de toneladas exportadas. No obstante, al analizar la información del Intercambio Comercial Argentino (ICA) del Indec, no se observa incremento en las exportaciones totales.
Veamos algunos datos: Argentina retomó el saldo positivo de su comercio exterior durante septiembre, con 414 millones de dólares de superávit (luego de tres meses consecutivos de déficit). La mejora de septiembre deriva de una reducción mensual del 5,4 por ciento en las importaciones, junto con un incremento del 0,9 por ciento en las exportaciones.
La menor demanda de importaciones se debe principalmente a una merma en las compras externas de Energía tras el fin del invierno. Esta situación se produce en un marco de mayores regulaciones de los productos importados, sobre los que se acaba de instaurar un sistema que promete ser superador.
Según informa el Indec, en septiembre las exportaciones de Productos Primarios cayeron un 16,4 por ciento en cantidades respecto al mismo mes del año anterior, y las Manufacturas de Origen Agropecuario se redujeron en un 23,1 por ciento. ¿Dónde está el efecto del Programa de Incremento Exportador? La diferencia tiene que ver con la metodología que utiliza el Indec para calcular las exportaciones. Este organismo contabiliza las ventas externas cuando las mercancías abandonan el país, lo que, generalmente, es bastante posterior al momento de liquidación de las divisas por esas operaciones.
Por tal motivo, los productos de soja y sus derivados exportados durante septiembre se irán observando en el ICA en los meses siguientes.
Distinta es la información del Balance Cambiario del Banco Central, que contabiliza las divisas efectivamente entradas y salidas a través del mercado único de cambios (concepto “caja”). Los últimos datos muestran un saldo superavitario de mercancías para septiembre de 6948 millones de dólares, con exportaciones por 12.891 millones de dólares e importaciones por 5943 millones de dólares. Adicionalmente, los datos del Balance Cambiario son los que explican la evolución de las Reservas Internacionales mes a mes.
Propongo ahora centrarnos en lo sustancial, las políticas que se están implementando para aumentar las Reservas.
A partir del 17 de octubre el Ministerio de Economía puso en funcionamiento el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), que reemplazará al anterior SIMI, con el objetivo de “obtener de manera anticipada información necesaria para generar previsibilidad y trazabilidad en las operaciones de importación”. Se buscará de esta forma limitar las operaciones de sobrefacturación de importaciones y el uso abusivo de cautelares que venían siendo detectadas por los organismos de control. También se propone priorizar las importaciones orientadas a sustentar la producción.
Además del SIRA y de los controles de la AFIP y de la Aduana para detectar operaciones ilegales, se han elevado los anticipos de impuestos para la importación de servicios como turismo y compras con tarjeta realizados en el exterior. Similar valor al de los anteriores se aplicó sobre los bienes suntuarios, que hasta el momento podían ser comprados con acceso al dólar oficial, sin diferenciaciones respecto de los insumos y piezas requeridas para la producción. También recientemente se implementó un dólar especial para los turistas extranjeros que visitan nuestro país.
Desde lo financiero, el BCRA extendió hasta el 31 de diciembre de 2023 la obligatoriedad para las empresas de refinanciar al menos el 60 por ciento de los vencimientos de capital de sus préstamos en moneda extranjera. Según la autoridad monetaria, desde la emisión de la norma original (octubre 2020) hasta fines de junio de 2022, se acumularon menores pagos netos por unos 3500 millones de dólares.
Las medidas comentadas son sólo algunas de las tantas que se están tomando para ordenar la cuestión cambiaria.
Más allá de los datos técnicos, se destaca el importante esfuerzo normativo y de control para incrementar las Reservas, junto con otros instrumentos, como los controles de precios, para de esa forma ir generando condiciones para estabilizar las expectativas e ir reduciendo los índices de inflación.
* Diputado Nacional del Frente de Todos. Presidente del Partido Solidario.