La feroz interna del macrismo activó la alarma. Ante la emergencia, el expresidente Mauricio Macri convocó para la semana próxima a la desactivada Mesa Nacional del PRO en un desayuno con la participación de Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta para intentar ponerle freno a la pelea salvaje de los dos aspirantes presidenciales del PRO. Pero la convocatoria que ideó Macri corre peligro y está en duda tras las muestras de autonomía que dieron sus --hasta ahora— acólitos. La jefa partidaria dejó trascender una frase suya a través de sus allegados: “Nadie me va a disciplinar”. Mientras que el alcalde porteño relativizó el liderazgo de Macri en el PRO y en JxC durante una entrevista periodística: “Somos todos iguales”, afirmó.
La urgencia de Macri y su prioridad, es frenar la feroz pelea entre Bullrich y Larreta, mientras juega con la incógnita y coquetea con su propia candidatura y su anhelado “segundo tiempo”. El convite de Macri fue confirmado por el diputado nacional del PRO y candidato a la gobernación bonaerense, Diego Santilli. El ex vicejefe de Gobierno porteño no adelantó ni el día ni el lugar, aunque se especula que se realice en la vivienda de Macri en la quinta Los Abrojos o en sus oficinas de Vicente López.
“Será un desayuno”, dijo Santilli al canal de noticias A24 y estimó que irán tanto Bullrich como Rodríguez Larreta. “Nosotros somos una familia chica que es el PRO dentro de una familia grande que es Juntos por el Cambio", argumentó el diputado macrista en la entrevista y luego parafraseó el Martín Fierro: "Y eso es lo que tenemos que cuidar. Tenemos que construir una alternativa con nuestras diferencias porque si los hermanos se pelean, nos devoran los de afuera”.
También están invitados al desayuno-cumbre la ex gobernadora bonaerense y ahora diputada por la Ciudad, María Eugenia Vidal (aunque estaría de viaje), sus pares de la Cámara baja Diego Santilli y Cristian Ritondo –ambos lanzados a la pelea por la gobernación bonaerense-- el senador Humberto Schiavoni y Federico Pinedo.
La idea de Macri es tratar de poner paños fríos al enfrentamiento entre Bullrich y Larreta, tras múltiples cruces y peleas que fueron in crescendo hasta que la jefa del PRO amenazó con “romperle la cara” a Felipe Miguel, el jefe de Gabinete de Larreta, por cuestionar públicamente que las actitudes de Bullrich son “funcionales al kirchnerismo”.
Pero los dos principales invitados dejaron dudas sobre sus presencias en el desayuno de Macri y podrían desairar al expresidente. Luego que se hizo pública la convocatoria, ambos dejaron clara su postura.
A pesar de que juega al lado de Macri, Bullrich dio muestras de su creciente autonomía con sus posturas más extremistas ligadas a la ultraderecha. También con respecto al expresidente. “Nadie me va a disciplinar”, fue la frase que la jefa del Pro dejó trascender a algunos medios periodísticos a través de su círculo más íntimo. Otra muestra de que no va a ceder en la disputa presidencial con Larreta dentro del macrismo y con su propio estilo. Bullrich también le dijo a sus allegados que “no hay buenos ni malos” en la pelea del PRO y consideró que “todos contribuyeron a las discusiones internas, incluso Mauricio, que generó ruido con la UCR, por ejemplo, luego de afirmar que el populismo en la Argentina había arrancado con Hipólito Yrigoyen”.
Larreta, en cambio, hizo pública su rebeldía en una entrevista en el canal LN+. “Hoy tenemos una mesa que conduce Juntos por el Cambio, de la que participamos Mauricio Macri como expresidente, los presidentes de los partidos, todos los líderes parlamentarios y los gobernadores, que somos 4″, dijo el alcalde porteño para poner en pie de igualdad la opinión de todos los integrantes.
La postura de bajarle el precio al liderazgo de Macri no pasó inadvertida para su entrevistador. “¿Hoy no tiene un líder? “, fue la repregunta. “Hoy tenemos una mesa de conducción de Juntos por el Cambio”, respondió Larreta. “¿Son todos iguales?”, interrogó Eduardo Feinmann. “Sí, tenemos una mesa en la que todos participamos”, sostuvo el jefe de Gobierno. El entrevistador lanzó entonces su estocada al sostener que “Macri promueve a Bullrich y a Jorge Macri”, y la respuesta fue contundente: “Macri tiene todo el derecho de promover a quien le parezca. Hoy no veo que promueva a uno u otro. Acá somos un equipo y, más allá de lo que promueva Macri, lo que importa es lo que elija la gente, no lo que diga Macri. Vamos a una PASO”, sostuvo Larreta.
Con su liderazgo cuestionado, Macri insistirá con su desayuno para sostenerlo. Habrá que ver quienes finalmente se sientan a la mesa.