Los movimientos sísmicos se propagan concéntricamente. Hay terremoto cuando esas vibraciones llegan a la superficie. Los desplazamientos al interior de la principal empresa editorial del mundo, que vende anualmente unos 800 millones de libros, no afectarán la autonomía de las 250 casas editoriales, distribuidas en cinco continentes, que publican más de 15.000 títulos nuevos cada año y facturan 3.400 millones de dólares. Los números, a simple vista, impactan por su magnitud. Hace una semana, Penguin Random House (PRH) finalizó la adquisición de los sellos de Ediciones B, antes propiedad del Grupo Zeta, que compró por 40 millones de euros en marzo. El grupo de comunicación alemán Bertelsmann anunció ayer que aumentó su participación del 53 al 75 por ciento en el grupo editorial PRH. El grupo británico Pearson, que controlaba el 47 por ciento del grupo, ha reducido su participación al 25 por ciento. La sorpresa “en la escala de Richter” la constituye el hecho de que Pearson había declarado, a principio de este año, que analizaba ceder la totalidad de su participación en esta empresa creada el 1° de julio de 2013, tras la fusión de Random House (Bertelsmann) y Penguin (Pearson).
El valor total de Penguin Random House, para esta operación, se fijó en 3.550 millones de dólares. Pearson informó que la venta de su participación, combinada con una recapitalización de esta editora, le daría un ingreso medio de 968 millones de dólares. En abril de 2018 cobrará 66 millones adicionales. Pearson, que sigue a pie juntillas el libreto neoliberal, esgrimió que sus cuentas no cierran por las dificultades de su actividad educativa de alto valor agregado en Estados Unidos. “Ajustar” es el verbo que mejor conjugan en todos los modos y tiempos. En enero de 2016 suprimió 4.000 puestos de trabajo para hacer frente a la desaceleración de la demanda. La empresa británica había reorientado sus actividades hacia el sector educativo luego de la venta en 2015 del diario Financial Times y de su participación en The Economist.
“La de Penguin Random House es una historia exitosa. Hemos completado la integración en poco tiempo; el grupo es el número uno por excelencia en todo el mundo en el sector de las editoriales”, declaró Thomas Rabe, presidente de Bertelsmann. “El negocio de los libros forma parte de la identidad de Bertelsmann desde hace más de 180 años. La transacción es muy atractiva desde el punto de vista económico, dado que la participación en beneficios de los accionistas de Bertelsmann aumentará en más de 60 millones de euros”, agregó Rabe. El grupo alemán se asegura con la mayoría del 75 por ciento más derechos de gobierno en Penguin Random House, que tendrá que nombrar al presidente del consejo de administración próximamente. Markus Dohle, miembro del comité ejecutivo de Bertelsmann y consejero delegado de Penguin Random House desde la fusión, seguirá dirigiendo la empresa. “Todo lo que Bertelsmann y Pearson han negociado y decidido es el símbolo de continuidad y estabilidad para Penguin Random House; por eso es también la mejor solución posible para autores, socios, editores y todos los empleados”, planteó Dohle.
PRH, que publicará los libros de Michelle y Barack Obama, ha editado la saga Game of Thrones (Juego de tronos) de George R.R. Martin y muchos otros best sellers como Cincuenta sombras de Grey de E.L.James y El código Da Vinci de Dan Brown. En el plantel hay 70 premios Nobel de Literatura, entre los que se destacan Alice Munro, Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez, José Saramago, Doris Lessing, J.M.Coetzee, Orhan Pamuk, V.S.Naipaul, Gunter Grass, William Faulkner, Ernest Hemingway, Elfriede Jelinek, Herta Müller y Svetlana Alexiévich.