Las próximas elecciones legislativas en Estados Unidos serán las primeras en la historia con candidatos LGBTQ en los cincuenta estados del país, una muestra de cómo esa comunidad se convirtió en una fuerza electoral cada vez más poderosa, a pesar de que este año se hayan propuesto más de 340 leyes anti LGTBQ.
Un nuevo informe de Victory Fund encontró que de los 1.065 candidatos LGBTQ que aspiraron en las primarias con miras a las elecciones de medio mandato del 8 de noviembre, 678 ganaron la postulación, un aumento de 18 por ciento respecto a 2020. Victory Fund se dedica a mantener la cantidad de funcionarios electos, abiertamente LGTBQ, en todos los niveles de gobierno.
Diversidad
Según esta ONG, los candidatos LGTBQ para el congreso son lo más racial y étnicamente diversos en la historia. Las personas identificadas como de color ocupan el 41 por ciento, con un crecimiento del 57,7 por ciento desde el año 2020. Mientras que la cantidad de candidatos latinos se duplicó pasando de seis a doce.
Actualmente en la Cámara de Representantes estadounidense solo nueve personas de la comunidad LGTBQ ocupan escaños, de los 435 que conforman la Cámara. En el Senado, por su parte, de cien escaños, solo dos están ocupados por personas de esta comunidad. “A pesar de las estimaciones conservadoras que muestran que las personas LGBTQ son el 5,6 por ciento de la población, Estados Unidos necesitaría elegir a quince personas LGBTQ más, para un total de 24, para tener una representación equitativa en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos” remarca el informe de Victory Fund.
El 86,1 por ciento de los candidatos LGBTQ que entraron en la contienda de las primarias son demócratas, como Maura Healey y Tina Kotek, quienes buscan convertirse en las primeras gobernadoras lesbianas en Massachusetts y Oregón, respectivamente. Les siguen los republicanos con un cuatro por ciento, ocupando un tres por ciento están los candidatos del partido de extrema derecha, El Partido Independiente Americano. Por último, se encuentran los candidatos del Partido Verde con un porcentaje del 2,2 y le siguen los del Partido Libertario con un 1,1 por ciento.
Los estados que cuentan con la mayor cantidad de candidatos de la comunidad LGTBQ son, en primer lugar, el estado de California con once candidatos para la Cámara de Representantes. El segundo lugar lo comparten el estado de New York, con ocho candidatos para la cámara y uno para el Senado, y el estado de Texas con nueve aspirantes para la cámara. Entre los estados que tienen un solo candidato se encuentra Alabama, Connecticut, Maine y Virginia.
En las elecciones de este 8 de noviembre en Estados Unidos, se votará la totalidad de escaños de la Cámara de Representantes (el equivalente a la Cámara de Diputados en Argentina) y la cantidad por estado se calcula en relación a la población. El Senado se maneja de manera diferente, ya que se renueva un tercio de la cantidad de escaños. Los mandatos de la Cámara duran dos años mientras que en el Senado duran seis.
El odio los hizo más fuertes
"Los votantes están hartos de los ataques despiadados contra la comunidad LGBTQ este año", dijo Annise Parker en un comunicado. Parker es ex alcaldesa de Houston y dirige la ONG Victory Fund. "Los fanáticos quieren que nos quedemos en casa y callados, pero sus ataques producen el efecto contrario y en cambio motivaron a una nueva ola de líderes LGBTQ que se presentan a cargos electivos", remarcó Parker.
El número de candidaturas fue aclamado como un progreso significativo para un año en el que legisladores estatales propusieron un récord de más de 340 leyes anti LGBTQ, según Human Rights Campaign (HRC), el grupo a favor de los derechos de igualdad de género más grande del país. Buena parte de la legislación apunta a prohibir que niños transgénero participen en categorías deportivas con su género declarado o a evitar que se hagan presentaciones escolares que involucren temas de inclusión en género.
"Este año se aprobó en Alabama el paquete legislativo más antitransgénero de la historia y es alarmante como crecen los ataques a los jóvenes", dijo Cathryn Oakley, directora en HRC para temas legislativos. "También habla de la desesperación de nuestros oponentes. La opinión pública se movió tanto en la dirección de la igualdad que se vieron obligados a tratar de que la gente le tema a los niños", agregó.
El impulso de leyes represivas hacia esta comunidad se extendió desde la base hasta el mismo Congreso, donde los republicanos de la Cámara baja proponen prohibiciones a que se hable públicamente de la identidad de género y la orientación sexual. Este 28 de marzo, el gobernador del estado de Florida y republicano, Ron de Santis, aprobó la ley popularmente denominada “No digas gay” que prohíbe que se dicten clases sobre estos temas desde el jardín de infantes hasta el tercer grado.
Según HRC, los estadounidenses LGBTQ están listos para convertirse en el bloque de votantes de más rápido crecimiento a una escala, alcance y velocidad que reconfigurará de manera fundamental el mapa electoral de Estados Unidos. En este momento, la comunidad representa a uno de cada diez votantes, aunque se espera que la cifra aumente a uno de cada siete para el final de la década, estima esta ONG en un informe publicado en octubre junto con la Universidad Estatal de Bowling Green, en Ohio.
Informe: Sofía Troiano