El intendente de la ciudad cordobesa de San Francisco, Damián Bernarte (52), baleado en la madrugada del pasado domingo a la salida de un evento por otro hombre, que fue detenido, continúa internado en estado “crítico y reservado”, aunque con "buena evolución hemodinámica", según el parte médico.
El informe médico del Hospital Irurraspe de San Francisco detalla que Bernarte se encuentra “multiinvadido en terapia intensiva, con analgesia, en plan de destete de la ventilación mecánica asistida, lúcido y con buena evolución hemodinámica". No obstante, aclara que su estado clínico sigue siendo “crítico y reservado”.
Como consecuencia del balazo en el abdomen efectuado con un arma corta calibre 22, el intendente fue sometido a cirugía para extirparle el riñón izquierdo y una parte del intestino delgado, además de ser intervenido en la zona del estómago, informaron desde ese hospital público.
En las primeras horas de la madrugada del domingo el intendente se retiraba de un festejo por el Día del Empleado Bancario y, cuando estaba por subir a su auto, fue abordado por el odontólogo Carlos Lucato (52), quien le disparó con un arma calibre 22, que aún no fue hallada, al igual que un bolso que se habría llevado del baúl del auto de la víctima.
Lucato está detenido y todavía no fue indagado por el delito de "homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma", aunque su abogado defensor aseguró a Télam que se desvinculó del ataque.
No obstante, de acuerdo a la investigación preliminar, el odontólogo habría sido el autor de los disparos por una cuestión "personal".
Tras ello, siempre según los voceros, se fue a bailar a un boliche, por lo que fue localizado y detenido cuando regresó a su domicilio.
En tanto, luego de recibir el balazo en la zona abdominal, el intendente pidió ayuda a unos vecinos, quienes lo trasladaron nuevamente hasta el salón del evento del que se acababa de retirar, donde recibió asistencia hasta que llegó el servicio de emergencia.
Mientras era atendido, Bernarte mencionó el apellido de Lucato como el del atacante y a partir de esos datos fue primero detenido Renzo Lucato (27), hijo del odontólogo, quien luego fue liberado, tras lo cual quedó aprehendido su padre, cuya esposa trabaja en el municipio con el intendente baleado.
Luego del hecho surgió la versión que indica que el móvil del ataque fue una supuesta relación sentimental extramatrimonial entre la esposa del odontólogo y el intendente.
El fiscal de la causa aseguró que se trató de un hecho de “carácter personal, de la vida privada" entre la víctima y el agresor.
Las dos parejas eran amigas, y en el caso de la mujer del intendente y la empleada municipal, se conocían desde niñas.
Según fuentes del caso, la decisión del odontólogo habría sido generada porque su mujer estaría manteniendo una relación amorosa con el intendente, que ahora lucha por su vida, tras recibir el balazo en la madrugada del domingo.
Sin embargo, el abogado de Lucato, Gabriel Cornaglia, negó la existencia de ese vínculo: "Nada existe de todo eso que se dice. Mi cliente lo niega y también dice que no tuvo nada que ver con el ataque”, remarcó.