Juntos por el Cambio (JxC) tiene en la Legislatura porteña la mayoría de las bancas y por eso no le costó aprobar el Presupuesto 2023 para la ciudad de Buenos Aires. Fueron 33 votos a favor y 27 en contra que juntó el Frente de Todos, la Izquierda e incluso Libertad Avanza. La sesión, que duró más de cinco horas, tuvo como eje central del debate sobre la crisis de los sistemas de salud y educación porteños. De hecho, en los alrededores de la Legislaturo se realizó una ruidosa movilización donde maestros y médicos repudiaron ajuste en dichas áreas.
El presupuesto porteño prevé gastos de $2,154 billones y que fue cuestionado por la oposición y por organizaciones sindicales que denunciaron ajustes en salud y educación, al tiempo que aumentaron las partidas para publicidad y propaganda. La legisladora del FdT Claudia Neira dijo que el presupuesto de CABA, por ejemplo, no prevé la "recomposición salarial" que demandan los médicos residentes de los hospitales porteños, quienes "cobran 120.000 pesos (mensuales) y hacen guardias de 24 horas que no son pagas".
Neira también afirmó que a 15 años de gobiernos del PRO en la Ciudad, el sistema de salud porteño "está en crisis". Por otro lado, indicó que mientras los impuestos sobre el patrimonio, como los inmuebles descendieron "un 40% desde 2008, aumentaron los que afectan a la actividad comercial y el consumo", entre ellos Ingresos Brutos y el tributo sobre las compras con tarjetas de crédito.
En tanto, el legislador Matías Barroetaveña (FdT) destacó que “la realidad del sur de la ciudad muestra indicadores calamitosos en términos de protección social, 8% de indigencia, 29% de la población sin secundaria, en la Comuna 8, más del 30% viven en villas”, afirmó.
Lejos de responder a los cuestionamientos, la legisladora de JxC y presidenta de la Comisión de Obras y Servicios Públicos, Natalia Fidel, defendió el proyecto y afirmó que “la Ciudad de Buenos Aires ha alcanzado un estado de equilibrio de sus cuentas públicas que nos permite alcanzar el déficit 0".
Mercedes de Mendieta, del Frente de Izquierda, advirtió sobre el "descenso progresivo" de la partida presupuestaria para educación que lleva adelante el macrismo, que en "2007 era del 27% y en el 2023 será del 16%".
Por su parte, Ramiro Marra de La Libertad Avanza, sostuvo que el Gobierno porteño "va a recaudar un 23% más que el año pasado y ni se le ocurre pensar en cómo bajarle los impuestos al contribuyente". Añadió que "lo único que piensa es cómo va a hacer para gastar esa plata. En lugar de seguir realizando gastos inútiles e innecesarios podrían probar con aliviar un poco al sector privado que cada vez la pasa peor".
Mientras tanto, afuera continuaba la movilización la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), la Asociación Docente Ademys, y la Asamblea de Médicos Residentes y Concurrentes. Las consignas era claras y contundentes: “Unidad de docentes y trabajadores de salud para que todas nuestras luchas triunfen”, ”Salario digno ya”, ”Menos marketing y más presupuesto”. Los manifestantes llevaron también un muñeco gigante que representa al jefe de Gobierno porteño.