El sospechoso detenido por el femicidio de su novia Jaqueline Castro, la adolescente de 17 años que desapareció el 2 de noviembre pasado y el jueves fue hallada muerta en una laguna de Chaco, había sido aprehendido durante la búsqueda de la víctima, luego liberado por falta de pruebas y nuevamente cayó preso cuando el cuerpo apareció en la represa frente a la que él vive y desde donde un testigo vio que arrojaban un bulto.
La fiscal Liliana Lupi, quien investiga el hecho, dijo que aguarda los resultados de estudios complementarios a la autopsia para determinar la causa del deceso, dado que la chica no presentaba lesiones visibles.
En la causa se encuentra detenido el novio de Jaqueline, de apellido Chávez, quien había sido aprehendido en un primer momento cuando la chica aún estaba desaparecida.
"Se ordenaron dos allanamientos, uno en el domicilio de Chávez y otro en el domicilio de la abuela donde él frecuentaba, con División Canes y la luz forense, que permite observar hasta una mínima gota de sangre. Pero dieron resultados negativos. No se encontró nada que lo vinculara a la desaparición, y al día siguiente, como no teníamos ninguna sospecha de delito, se ordenó su libertad", explicó Lupi. Luego "se recibió en el 911 un llamado anónimo en el que dijo haber observado que alguien tiraba un bulto en la represa, donde posteriormente se halló un cuerpo en avanzado estado de descomposición", continuó.
La fiscal Lupi detalló que el sospechoso "vive enfrente a la represa" y que, tras confirmase la identidad del cuerpo hallado, el joven estuvo unas horas prófugo y por la tarde "fue detenido nuevamente".