La inflación mayorista fue del 4,8 por ciento en octubre y así quedó por debajo de los precios minoristas, que avanzaron 6,3 por ciento en igual mes. La inflación mayorista suele anticipar los movimientos de la minorista y refleja la “presión” que recogen los precios que termina pagando el consumidor en mostrador.
A su vez, el 4,8 por ciento que relevó Indec marcó una desaceleración respecto de la variación de septiembre, que había sido del 5,5 por ciento. Por entonces también menor que la inflación minorista, aunque la brecha se acrecentó fuerte en octubre.
Los rubros de los precios mayoristas que pagan los productores y/o distribuidores y que subieron por encima del promedio general fueron los siguientes: productos minerales no metálicos (es decir, insumos de la construcción) creció 7,3 por ciento; máquinas y aparatos eléctricos trepó 7,2; productos de material textil y los fabricados con caucho y plástico subieron 7 por ciento, mientras que en máquinas y equipos la inflación fue 6,6 por ciento.
Por otro lado, sobresalió el hecho de que la inflación mayorista fuera mayor cuando se adquirieron productos importados en relación a la compra de insumos nacionales. La primera fue 6,6 por ciento mensual versus 4,6 en los productos nacionales.
El Indec también difundió que el Índice del costo de la construcción (ICC) en el Gran Buenos Aires subió una variación del 6,8 por ciento en octubre. El costo de la mano de obra trepó por encima de los otros dos componentes marcando un aumento del 7,8 por ciento en el mes. En tanto, los gastos generales subieron 6,9 y los materiales 5,9 por ciento.