Un cruce de fines se propone esta vez el séptimo Encuentro de Acordeonistas del Río de la Plata, que se llevará a cabo durante este fin de semana en el Club Isleños Unidos, ubicado en la Isla Santiago de Ensenada. Entre ellos -como novedad respecto de los anteriores- aparece la confluencia de los organizadores con la Asociación Caboverdeana de Ensenada, una alianza destinada a propalar la gravitación del acordeón en la música afro, a través de dos géneros clave -el candombe y el funaná— en una fecha clave: el día de la Conciencia negra, que también es el de la Soberanía Nacional.
Por el candombe dará la cara la poeta y música marplatense Angie Hesse, mediante el taller Candombe: tambores y acordeón, en el que revelará los pequeños enigmas que retumban la tríada piano-chico-repique. Por la senda negra transitará también Santiago Sosa Monteiro quien, en representación de la Asociación Caboverdeana de Ensenada, hablará sobre el funaná, un ritmo basado en el acordeón muy utilizado en Cabo Verde, al igual que la morna y la coladeira.
“Nos parece importante concientizar sobre la presencia de los africanos en la historia de Argentina en la música, en las costumbres típicas, en las palabras, en el lunfardo, y en los diferentes aspectos gastronómicos”, resalta Sosa Monteiro. “Concientizar también que el tango tiene una presencia negra muy fuerte a través de la milonga. Es importantísimo crear una identidad real argentina, agregar que también somos descendientes de africanos que vinieron en etapas distintas: la colonial, la época en que ciertos países africanos estaban luchando por descolonizarse, y esta última etapa, a partir de 1990. Concientizar, al cabo, que estamos presentes, que somos aproximadamente unos dos millones de afrodescendientes aquí, y que estamos siempre activos recordando nuestra cultura, recordando de dónde venimos, hacia dónde vamos y el esfuerzo que hicieron nuestros antepasados para llegar a estas tierras, en algunos casos obligados, pasando penurias y luchando por la independencia de nuestro país sin ser reconocidos, como ha pasado con María del Valle y muchas personas que hoy en día están siendo valoradas, pero que merecen ser recordadas en toda la historia”
Las jornadas devendrán además en un ajetreado vaivén entre rondas de acordeones, charlas, talleres y conciertos que, claro, tendrán al acordeón como estrella. “Este es un espacio basado en el intercambio horizontal, más que en la competencia y el espectáculo”, enfatiza Matías Di Loreto, alma mater del encuentro. “En este sentido, nos interesa conocer qué música producen o interpretan les acordeonistas de la región, a la vez que promover un espacio para acercar a les acordeonistas, y sus trabajos a nuevas audiencias”.
Apoyado por el programa “Gestionar Futuro” del Ministerio de Cultura de la Nación, y por la Dirección de Cultura del municipio de Ensenada, otro de los propósitos del Encuentro es que chicos y chicas de la Isla Santiago participen del taller sociocomunitario de música que da de cara al pueblo el Club Isleños Unidos, ubicado en un recodo del camino costero -a orillas del río- donde habitualmente se realizan festivales, peñas y ferias. “Nos pareció buena la oportunidad de hacer el encuentro aquí por la conexión con el Río de La Plata y, al mismo tiempo, por el intercambio que se va a dar entre los acordeonistas y los chicos y chicas del taller de música afro”, amplia Di Loreto.
Al taller de candombe y la charla sobre el funaná se sumarán también la típica ronda de acordeonistas en la que medio centenar de amantes del instrumentos intercambiarán experiencias y, claro, los recitales que darán entre senderos vegetales y casas de madera, el Dúo Dinamita, DJ Luche, Mais Ninguém, y los dúos Milagros Blanco & Lucas Farfaglia; Miguel Cantero & Juan Páez; y Nahiell Dornel & Julián Fregonese. “El acordeón es un instrumento que se adapta a repertorios súper variados y eclécticos”, señala el profe Dornell. “Por eso, hacen falta más ofertas académicas para estudiarlo y este encuentro es una manera de despertar ese interés”.
Milagros Blanco hace hincapié por su parte en el protagonismo “sutil” que tienen el instrumento en la historia de la música argentina. “Es como una presencia omnipresente”, asegura la acordeonista. “Digo esto porque siempre estuvo muy presente, pero camuflado en todos los géneros musicales, artistas, bandas y grabaciones. Lo que falta entonces es reconocer y descubrir la capacidad que el acordeón tiene de desarmar la música y explotar al cien por cien todo el abanico sonoro que posee”.
“Pensemos que el acordeón se toca desde la Quiaca hasta la meseta Patagónica, donde el chamamé está presente a través de este instrumento”, refuerza a su turno Natalio Sturla, oriundo de Gualeguaychú. “Jóvenes artistas de este y otros géneros como la cumbia le están dando una nueva presencia en los escenarios. En el litoral, obvio, es conocida su importancia y las nuevas generaciones de acordeonistas nos están ofreciendo variantes de estilos y nuevas composiciones que ponen de manifiesto la actividad en torno a un instrumento que ya tiene casi doscientos años”, finaliza.
