Legisladores porteños del bloque Republicanos Unidos, cuyo líder es Ricardo López Murphy, presentaron un amparo en la Justicia para evitar que este martes se aplique el decreto de duelo nacional establecido por Alberto Fernández tras la muerte de la presidenta de Madres de Plaza de Mayo y referente de los Derechos Humanos, Hebe de Bonafini.
La presentación lleva la firma de la legisladora porteña Marina Kienast, compañera de bloque de Roberto García Moritán. Además, acompañan el proyecto el abogado José Lucas Magioncalda y los miembros de la Juventud de "Republicanos Unidos" Rodrigo Forlenza, Facundo Sapienza, Florencia Ravelo Niglia, Sebastián Pedrozo, Jonthan Tolisano y Federico Kaufman.
Con el amparo, se busca que la bandera argentina no sea izada a media asta, tal como establece la disposición. En la solicitud, los legisladores intentan atribuirle características autoritarias y xenófobas a la figura de Hebe de Bonafini, un emblema de los derechos humanos que enfrentó la última dictadura cívico-militar. Además, considera que el escrito destaca que "la norma pretende, como fin último, instalar en los niños reflexiones y sentimientos democráticos y de defensa del Estado de Derecho y la plena vigencia de los Derechos Humanos".
"No basta con que la Sra. Hebe Pastor de Bonafini haya sido presidente de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, para su reivindicación oficial en las escuelas, sino que resulta imprescindible que sus expresiones públicas hayan estado consustanciadas con dichos valores, lo cual, lamentablemente, no ha ocurrido", agrega.
Negacionismo
Esta no es la primera iniciativa negacionista del bloque liderado por López Murphy, que forma parte de Juntos por el Cambio. El pasado 24 de marzo, la Legislatura porteña había convocado a una sesión especial por el 24 de marzo, con el fin de conmemorar el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
La mayoría de los bloques coincidieron en un repudio al terrorismo de Estado y al golpe de 1976, pero los únicos que no apoyaron la iniciativa fueron los bloques de Republicanos Unidos y de Libertad Avanza, que responde a Javier Milei.
Ambas bancadas ensayaron una avanzada negacionista en la sesión, en la que no faltaron los planteos de "contar la historia completa", ni las referencias a los "excesos de la represión" y a la "subversión".
Fue la primera vez, en muchos años, que un grupo político con representación parlamentaria buscó quebrar uno de los consensos democráticos.