El juez Federal Nº1 de La Plata, Alejo Ramos Padilla, recordó este jueves a la expresidenta de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, que murió este domingo a sus 93 años. El magistrado, históricamente vinculado a las causas y reclamos vinculados a los derechos humanos, destacó el rol de Hebe para el regreso a la democracia tras la sangrienta dictadura cívico-militar.
Este jueves Hebe de Bonafini será homenajeada con una gran marcha alrededor de la Pirámide de Mayo, un símbolo de la lucha de las Madres. El acto está convocado para las 15.30 y además se esparcirán las cenizas de Bonafini en el lugar. Por AM750, Ramos Padilla aseguró que este gran reconocimiento se debe a que “Hebe fue esa mujer que, cuando ya estaba funcionando Madres de Plaza de Mayo y ocurre lo de la Iglesia de la Santa Cruz, le da valor a todas las Madres y pide ir a la Plaza”.
Hebe y la valentía
“Hacer visible más allá del temor y la posibilidad cierta de estar arriesgando su vida. Ese fue el modo en que se organizaron. Esa fue la gran valentía de Hebe”, enfatizó el juez que reveló que su llegada a Hebe fue a través de “Chicha” Mariani, una de las 12 fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo.
Para referirse a ambas, apuntó: “Eran mujeres que tenían que salir a la calle. Salían cuando escuchaban algún ruido para ver lo que había ocurrido. Les debemos la democracia”. Y agregó: “Todas fueron transitando diferentes caminos. Abuelas recurrió a la ciencia y el estudio de datos genéticos. Lo que hizo Hebe fue poner a la luz de todos, con su modo y potencia, las atrocidades que estaban a la vista de todo el mundo”.
Militancia y compromiso
Para Ramos Padilla, esta actitud de Hebe no fue casual, y tiene mucha vinculación con una de las premisas de las dictaduras militares como la que vivió Argentina en 1976, donde “para llevar adelante un proceso como el que llevó, hay que actuar con la indiferencia de muchos”.
“Hasta el último día Hebe cuestionó el funcionamiento del Poder Judicial y los medios de comunicación. Ella requería que el resto de las personas se transformaran en militantes. Era una luchadora por la justicia social. Sociabilizó la maternidad”, dijo.
“Ella tenía la característica de que si veía una injusticia, organizaba algo para cambiar la situación. Eso era permanente en ella. Hebe. Tomó la posta de Azucena Villaflor y Esther Ballestrino”, agregó.
Y finalizó: “Cuando buscamos referentes de Derechos Humanos y hablan de Gandhi y Mandela, pienso que a veces pretendemos ocultar su lucha. Es muy importante la enseñanza que nos legaron y este modo distinto que tenía Hebe, que era el hacer pública las cosas”.