Balenciaga, la famosa firma de alta costura de España, retiró una campaña publicitaria de sus redes sociales tras ser acusada de “sexualizar” a menores y “promover la pedofília”. En las imágenes promocionales que había difundido, aparecían niños y niñas de cinco años junto a osos de peluche con vestimenta sadomasoquista, chokers de cuero, cadenas y arneses.
Pero además, en la campaña de primavera 2023, junto a Adidas, se ve una cartera sobre un fallo de la Corte de Estados Unidos ratificando la ley de protección que penaliza la pornografía infantil. Y la marca se vio envuelta en un nuevo escándalo que involucra denuncias por promover la explotación sexual infantil.
Tras el repudio recibido en las plataformas virtuales, la compañía pidió disculpas de forma pública por la producción fotográfica que era la promoción de una colección navideña. La serie había sido realizada por el fotógrafo italiano Gabriele Galimberti.
"Nuestras bolsas de osos de peluche no deberían haber aparecido con niños en esta campaña. Hemos eliminado inmediatamente la campaña de todas las plataformas”, expresó la empresa desde su cuenta de Instagram.
Acusan a la marca de promover la explotación sexual infantil
Pero la controversia continuó, cuando una usuaria de Twitter —shoe0nhead— con más de 500 mil seguidores, reveló otro detalle. En una de las fotos de la campaña primaveral de Balenciaga junto a Adidas dejaba ver un fragmento del fallo con que la Corte Suprema de Estados Unidos había ratificado la Ley Protect que penaliza la publicidad, promoción, presentación o distribución de imágenes sobre explotación sexual de niñas, niños y adolescentes en ese país.
En un intento por volver a apagar el fuego, la compañía reapareció en sus redes sociales con otro mensaje: "Nos disculpamos por mostrar documentos inquietantes en nuestra campaña. Nos tomamos este asunto muy en serio y estamos tomando acciones legales contra las partes responsables de crear el set e incluir elementos no aprobados para nuestra sesión de fotos de la campaña primavera 2023. Condenamos enérgicamente el abuso de niños en cualquier forma. Defendemos la seguridad y el bienestar de los niños”.
No es la primera vez que la firma capitaneada por el georgiano Demna Gvasalia y propiedad del conglomerado de lujo Kering se ve en medio de una controversia de magnitud internacional. Este año, Balenciaga fue repudiada por poner a la venta un bolso que simula ser una bolsa de basura por un valor de 1.790 dólares y una colección limitada de zapatillas rotas y gastadas.
