El nuevo dueño de Twitter, el empresario multimillonario Elon Musk, afirmó este jueves que aplicará una “amnistía” a las cuentas suspendidas a partir de la semana que viene, tras una polémica encuesta realizada en su perfil en la que votaron al menos 3 millones de usuarios.
En las últimas horas, Musk preguntó: "¿Twitter debería ofrecer una amnistía general a las cuentas suspendidas, siempre y cuando no hayan infringido la ley o enviado spam de manera escandalosa? Sí/No". Finalmente, hubo un 72% de respuestas favorables. "El pueblo ha hablado. La amnistía empieza la semana que viene. Vox populi, vox dei", expresó.
Hace unos días, el fundador de la compañía de autos eléctricos Tesla ya hizo otro "referéndum" online, con cinco veces más participación y resultado muy reñido, que le llevó a restablecer la cuenta del expresidente de EEUU Donald Trump, a quien Twitter suspendió indefinidamente después de vincular sus comentarios con el asalto al Capitolio.
Previamente, el magnate sudafricano manifestó su rechazo a los vetos permanentes en la red social y devolvió sus cuentas a otros personajes polémicos, como la congresista de extrema derecha Marjorie Taylor Greene, vetada desde hace meses por publicar falsedades sobre la covid-19.
A principios de noviembre, Musk indicó que Twitter "no permitirá" que ninguna persona que haya sido eliminada de la red social por violar sus reglas regrese a la plataforma hasta que la compañía tenga un proceso claro.
El magnate, que compró la red por 44.000 millones de dólares, dijo además en una serie de tuits que "el consejo de moderación de contenido de Twitter integrará representantes con puntos de vista muy divergentes, que sin duda incluirán a la comunidad de derechos civiles y grupos que combaten la violencia alimentada por el odio".
Preocupaciones sobre el futuro de Twitter
Varios especialistas manifestaron que rehabilitar de manera general las cuentas suspendidas en Twitter podría alarmar a las autoridades gubernamentales, que están vigilando de cerca cómo gestiona Musk los discursos de odio.
También podría asustar a Apple y Google, que tienen el poder de prohibir a Twitter en sus tiendas de aplicaciones móviles y negar el acceso a la plataforma a cientos de millones de sus usuarios.
El empresario explicó muchas veces que compró Twitter porque la considera la "plaza pública digital", esencial para la democracia en el mundo.
El uso de este mecanismo de consulta para definir pautas en la red social contradice un compromiso expresado por Musk poco después de la adquisición de la empresa, cuando anunció la formación inminente de un "consejo de moderación (de contenidos) con puntos de vista muy diversos".
"No se tomarán decisiones importantes sobre el contenido o el restablecimiento de cuentas hasta que se reúna este consejo", tuiteó.
Por otro lado, varias marcas relevantes, incluidas Volkswagen, General Motors y General Mills, anunciaron que suspenderán la inversión en publicidad en Twitter desde su adquisición por parte de Musk.