Con un acto en Moreno, el senador provincial Joaquín De la Torre lanzó su candidatura a la gobernación, mediante la cual busca posicionarse por sobre el resto de los aspirantes del PRO y quedarse con el casillero más alto de la boleta que, desde Juntos por el Cambio, buscará devolver al partido amarillo al poder bonaerense.
Con un discurso fuertemente anclado en la agenda de seguridad, De la Torre se posiciona en el sector más intransigente de la oposición que se referencia en la figura de Patricia Bullrich a quien apoyó en su aventura presidencialista. “Patricia ya mostró en este tiempo que tiene lo que hay que tener para gobernar la Argentina” dijo el ex Ministro de Producción y de Gobierno de María Eugenia Vidal.
En una clara intención por reivindicar ese perfil halcón, De la Torre atacó con dureza al gobierno provincial y nacional poniendo foco en la inseguridad y la situación económica y prometió “ordenar las cuentas” bonaerenses a partir de la eliminación de al menos diez ministerios que forman parte de la estructura gubernamental de la provincia. “Hay que poner orden en las cuentas y poner orden en la calle”, afirmó en el encuentro que tuvo lugar en el barrio Cuartel V.
“No hay que permitir que aquellos que se creen dueños de la calle hoy sigan extorsionando a los gobiernos”, aseguró el candidato, en una clara sintonía con el discurso que, además de Bullrich, viene defendiendo sin tapujos el ex presidente Mauricio Macri.
Desde hace tiempo, la campaña de posicionamiento del dirigente amarillo que también fue intendente de San Miguel entre 2007 y 2016 viene cobrando protagonismo entre los sectores más duros de la oposición a partir de campañas callejeras que buscan generar impacto y fidelización entre el electorado más intransigente, que se reparte entre el PRO y los libertario.
A la cartelería que reza “Con Macri había futuro” y “La Bullrich tiene coraje”, se le suman pantallas callejeras que incluso llegan a la porteña Avenida Corrientes con frases que rozan discursos de odio. El que dice “Basta de todes”, quizás sea el que mayor impacto genera.
De origen en el peronismo, De la Torre formó parte de la estructura oficial del justicialismo bonaerense hasta que decidió sumarse al Frente Renovador que empoderó a Sergio Massa en las elecciones legislativas del año 2013. Tanto en el 2007 como en el 2011, había sido elegido intendente de San Miguel desde la boleta del Frente para la Victoria.
Con la llegada de Vidal al gobierno provincial, se alineó en Cambiemos y, años más tarde, decidió reivindicar su filiación original y se sumó al Peronismo Republicano con el que Miguel Ángel Pichetto sostiene su presencia en Juntos por el Cambio.
“Si Joaquín le puede mostrar lo que hizo en San Miguel, queda claro que puede hacer en la provincia de Buenos Aires. Lo que uno hace y cambia queda siempre en el corazón de los ciudadanos. Me comprometo con todos ustedes a que este cambio sea verdadero, sin miedos, porque los cambios nos van a traer prosperidad, progreso y nos van a dar las posibilidades que hoy hemos perdido”, dijo Bullrich en el acto de Moreno que De la Torre busca agendar como el nuevo mojón de su construcción provincial.