El acuerdo comercial con Brasil permitirá importar energía a "precios competitivos", afirmó el viernes la secretaria de Energía, Flavia Royon. La prórroga, hasta 2025, del memorándum de intercambio energético posibilitará también implementar un sistema de pago de monedas locales para las operaciones comerciales de gas y energía eléctrica. En el último invierno el aporte de las importaciones de energía eléctrica provenientes de Brasil fue clave para Argentina.
“(El acuerdo) permite afrontar o prever un trabajo para el invierno de 2023 en el que la Argentina, con el gasoducto aún no terminado, va a necesitar importaciones de energía a precios competitivos”, enfatizó Royon en diálogo con Télam Radio. El acuerdo, que se actualizará de manera automática cada cuatro años, fija las modalidades de intercambio en materia de electricidad y gas. Argentina es superavitario en el comercio de ambas especies pero requiere mayores importaciones en época invernal.
Según información oficial, en 2022 el abastecimiento de energía eléctrica proveniente de Brasil sirvió para ahorrar 800 millones de dólares. Argentina pudo devolver provisiones de los barcos de gas natural licuado (GNL). A su vez, según destacó la funcionaria, “en algunos momentos la demanda de importación de Brasil llegó a ser aproximadamente el 8 por ciento de la demanda de energía eléctrica de la Argentina, así que fue un aporte importante”.
En cuanto a precios, si bien no trascendió información de la valorización que involucra la actualización del acuerdo, cabe recordar que, como consecuencia de la guerra en Ucrania, el precio del GNL pasó de 8,5 dólares por millón de BTU en 2020 a 32,0 dólares en 2022. El déficit energético significó para Argentina una pérdida de 5000 millones de dólares entre enero y octubre de este año.
El Memorándum de Intercambio de Energía hasta 2025 es, además, de modalidad no interrumpible y tiene como aspecto innovador que permitirá utilizar un sistema de pagos en moneda local o especies. El intercambio en moneda local se implementará por medio del “Convenio del Sistema de Pagos en Moneda Local” firmado en septiembre de 2008 por ambos países. Y a su vez Royon explicó que para evitar perder divisas “se puede devolver (el pago) en energía en otra época del año”.
Brasil es un mercado importante para el gas argentino, y a través de Vaca Muerta Argentina podría convertirse en un exportador neto de gas a partir reservas no convencionales. Actualmente Argentina provee gas al país vecino, toda vez que el abastecimiento interno esté garantizado, a través de la conexión entre Paso de los Libres y la Central Térmica ubicada en Uruguaiana. Pero ambos equipos de gobierno avanzan en las negociaciones para concretar el financiamiento de Brasil para próximas etapas de construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
Integración regional
El Memorándum con Brasil fue rubricado el jueves por la secretaria de Energía, Flavia Royón, y el viceministro de Minas y Energía de Brasil, Hailton Madureira de Almeida. También fueron parte de las negociaciones, y de la firma del entendimiento, el embajador argentino en el país vecino, Daniel Scioli, representantes de Cammesa, la compañía que administra el mercado eléctrico mayorista local, y la Cancillería argentina.
En declaraciones radiales, Royon recordó que, además del acuerdo con Brasil, hace dos semanas se logró un entendimiento similar con Chile mediante el cual se acordó la reactivación de los intercambios bidireccionales de energía a través de la línea eléctrica de la compañía AES Andes en Salta. La iniciativa tiene como objetivo abaratar los costos sistémicos y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero. “Este acuerdo es parte de la agenda que tenemos como país, de la integración energética regional que queremos lograr”, subrayó la funcionaria.
A través de la línea de interconexión InterAndes durante el día Argentina podrá importar hasta 80 megawatt (MW) de energías provenientes de centrales solares de Chile, mientras que durante la noche podrá exportar hacia Chile hasta 200 MW de fuente de generación térmica a partir de gas natural.
Royon también afirmó que el gobierno se encuentra “en conversación” con Bolivia para arribar a un acuerdo similar para el caso del gas. El refrendado este año significó un incremento del aprovisionamiento del 21 por ciento respecto de los volúmenes acordados en 2020, Argentina llegó a importar un volumen de gas natural boliviano de 14 MMm3 por día en los picos de demanda. A su vez el precio de los primeros envíos era de 9 dólares el millón de BTU y hacia el final del contrato ascenderían al doble. Se estima que entre un 15 y un 18 por ciento de las necesidades del combustible de Argentina son provistas por Bolivia y la importación de GNL.