La industria del libro es sin dudas una de las más amplias. Con un gran impacto social, los títulos vienen y van, circulan a lo largo y ancho del país, aún con las limitaciones que impone el yugo porteñocentrista a la cultura.
En ese marco, el NOA es una región con variedad editorial y hacia el cierre de 2022 los responsables de algunos sellos novísimos, de 2016 a hoy, de Tucumán a Salta, y de Catamarca a La Rioja, describen su actualidad, a modo de balance. Y proyectan lo que vendrá, mucho más allá de las geografías.
Miradas tucumanas
“Trabajamos muy a conciencia en cada una de nuestras publicaciones”, asegura Daniel Ocaranza quien, junto a Zaida Kassab, comanda Falta Envido Ediciones. La propuesta surgió en 2018, con convocatorias que abarcan narrativa, poesía y teatro.
“El criterio que manejamos es la obra en sí. Es decir, si la obra que leemos nos impacta, si se vuelve pregnante a la memoria, sin dudas es algo que vamos a publicar; debe funcionar la obra de por sí”, señala Ocaranza y aclara: “Como la convocatoria es federal los autores también lo son, eso hace que tengamos en el catálogo a narradores y poetas de La Plata, Tandil, Santa Fe, Salta, Santiago, Catamarca, La Rioja, Mendoza, entre otros puntos. Hasta ahora tenemos 24 títulos publicados en líneas diferenciadas por colecciones: Permanente (Narrativa), Indeleble (Poesía), Bambalinas (teatro), Escafandra (Poesía joven emergente) y hasta ahora solo una antología: Casas Remotas (narradoras contemporáneas del NOA)”
Falta Envido, que abrirá nuevas convocatorias a partir de abril de 2023, tiene una “hermana melliza”, Puerta Roja Ediciones, que funciona con recepción abierta, y brinda servicios de imprenta, hasta ahora en poesía y narrativa. “La condición principal de Puerta Roja Ediciones es que le autorx esté dispuesto a trabajar la edición sobre el texto, no publicamos libros sin editar. Tiene un año y medio de funcionamiento y hasta el momento ocho títulos publicados. Les autorxs pueden ser o no de Tucumán”, destacan, y afirman que “ambos sellos tienen como política editorial la construcción de un campo cultural federal”.
En otro orden de cosas, María José Bovi, de Monoambiente, puntualiza: “El año 2022, para nuestro sello fue un respiro y una alegría. Volver a las mesas de reuniones sin miedo y discutir todo lo que pensamos durante la pandemia. Volvimos al ruedo de los viajes, las ferias, los encuentros, los vínculos. La edición volvió a vivirse con cuerpos móviles. Reactivamos capitales y exploramos palabras”.
Bovi recalca que en el año que termina abrieron convocatorias para trabajar libros con autorxs del colectivo LGTB+ y dictaron talleres de escritura de narrativa, fuera y en la provincia, que se coronaron con publicaciones “y se pusieron en cola para nuevos proyectos 2023. "Este año cerramos con ‘Quisiera no tener corazón y ser hermosa’, de la mocatriz Salustiano Zavalía. Con su presentación que será el 16 de diciembre en Tucumán, el primer libro que presentamos en convocatorias nacionales y con el que obtuvimos el Fomento del Libro 2022”. Con vistas al 2023, la editora adelantó: “Arrancamos con nuestra primera antología de mujeres, lesbianas, trans, travestis, no binaries, bisexuales, putos y maricas. Se titulará MONOBLOCK. Y también con nuestra antología ‘Narrar los cuerpos: mis cuerpos'.
Finalmente, una de las artífices de Monoambiente, que funciona desde 2016, considera que, en Tucumán la oferta editorial creció en los últimos años, “nos encontramos en un momento de mucho diálogo y producción. Hay libros para todos los públicos. También nuevos espacios, como la librería Madre Selva, que acompañan a los proyectos independientes y permiten otros canales de venta y circulación de palabra”, cerró.
Páginas nacidas en pandemia
La crisis sanitaria a causa de la covid-19 paralizó a muchos sectores, sin embargo, en medio del contexto más terrible en lo que va del siglo, en el NOA emergieron alguna editoriales. Así Eugenia Murúa fundó en La Rioja, Hermosa cena, un proyecto independiente que funciona en la zona de la chaya desde el 2020. En su catálogo, con colecciones de poesía, narrativa y publicaciones alternativas, les lectores encuentran literatura contemporánea potente con algunas resonancias entre lo pop y lo popular.
El método de selección editorial se cristaliza en convocatorias anuales que, por el momento se circunscriben a les autorxs de la provincia de La Rioja. “Esto es así debido que las oportunidades de edición son escasas y hay mucho para decir”, subraya Murúa.
Y en seguida desgrana recomendaciones de su propio catálogo: los poemarios "Un cuerpo es algo que está en el lugar de otra cosa", de Yael Guerrero, y "Reivindicando a Piscis", de María A. Palacios, y el volumen de cuentos "Los Malhabidos", de Victoria Baigorrí, que se consiguen en diversas librerías del país o a través de las redes sociales.
Al opinar sobre las editoriales del NOA, Murúa revela: “no existen características comunes más allá de la persistencia en la separación de que aquello que se agota en lo regional”. Y añade: “Las diferencias existen, están marcadas pero como coincidencia, no reproducimos el discurso tradicionalista folklórico sino que siempre presentamos alguna innovación, interrupción, mixeo o directamente la contra a ese discurso”
En un movimiento de La Rioja hacia Catamarca está El Guadal Editora, conformada en 2021 y que realizan desde entonces en trabajo en dos colecciones: Tesón, Bravura y Rebeldía y La Noche Escarabajo. La primera nuclea textos académicos y la segunda, poesía.
En este sentido, José Luis Astrada detalla: “El criterio editorial está orientado a producir libros interesantes desde lo visual y desde el contenido. Los libros académicos están pensados para un público más general que solo el universitario, por ejemplo. Esto no significa que procuramos obras simples, sino que editamos libros para un público académico y no académico”.
En consonancia con lo anterior, Astrada amplía: “Este público ha servido, a su vez, como difusor de nuestro trabajo editorial: las historias en redes ayudaron enormemente para que El Guadal Editora sea más conocida”.
Atento a las novedades de su sello, el editor relata: “Este casi fin de año nos encuentra con dos libros de crítica publicados recientemente 'Ciudad, género y violencia en la literatura catamarqueña 2000 – 2020' y 'Escenas y Ensayos. Crítica socioteatral catamarqueña'. Además, reeditamos 'Nocturnos', de Luis Franco; y lanzamos 'Punto y Línea en el Relieve', el primer libro catálogo sobre artistas visuales de Catamarca”.
A modo de síntesis, el artesano de libros rememora: “Este año participamos en todas las ferias que pudimos. En la última, la 3° Feria Librera de El Cebil, en Catamarca, fuimos parte del conversatorio de editoriales del NOA. Además de coincidir en las dificultades ocasionadas por la crisis económica, nos unimos en la idea de trabajar en redes de editores, de librerías, centros culturales, entre otros; y en la importancia de las editoriales independientes al momento de poner al alcance de los lectores libros que, de otra manera, no estarían y en la necesidad de publicar autores, tanto literarios como académicos, que hablen sobre las particulares problemáticas de cada provincia”.
Aires nuevos en Salta
Salta es una provincia donde la cultura se multiplica. Una prueba de ello es el Demiurgo “una nueva propuesta editorial en Salta para los amantes de las buenas letras”, explica Rolando Vargas, y sostiene “comprometidos con el oficio, nos especializamos en obras de tirada media y corta, atendiendo a detalles y terminaciones de excelencia, con imprenta propia , en distintos formatos y soportes materiales”.
“La novedad de nuestra editorial en la región, en relación a otras, es que contamos con el servicio de impresión y encuadernación, además de diseño, maquetación y registro de obra. De modo tal que todo el proceso que conlleva la edición de un libro está vigilado, cuidado y en línea con las necesidades del sector”.
Por otro lado, Vargas sostiene que 2022 “ha sido un año particularmente duro para el sector editorial debido a los vaivenes económicos y la suba de materiales que repercuten directamente en los presupuestos y posibilidades de edición para escritores y escritoras que deben solventar sus propios libros”, aunque rescata a las nuevas tecnologías como facilitadoras en la distribución de productos culturales a bajo costo.
Entre los títulos de este novísimo sello local, sobresalen: "Deserciones", de Fernanda Agüero; "Memoria Colectiva" y "Volveré y seré millones", de Raquel Escudero. "Kelloticar", de Carlos Muller, y "Fembras", de Lucrecia Coscio.
Todavía más, según Vargas, la última edición de la Feria del libro de Salta permitió vislumbrar un interés todavía vigente por las obras literarias en papel impreso, “a pesar del auge de las redes y otros canales de acceso a la literatura en formato digital. La esperanza y la apuesta de El Demiurgo Editorial es que haciendo la diferencia con productos de calidad, el lector se vea tentado a adquirir un libro, casi como objeto fetiche que transmita arte y belleza, desde su contenido hasta su materialidad misma. Ser un puente tendido entre el creador y su público es un desafío que asumimos con la más alta responsabilidad y alegría”.
“Los libros son de esa clase de instrumentos que, una vez inventados, no pudieron ser mejorados, simplemente porque son buenos”, expuso alguna vez el semiólogo y novelista italiano Umberto Eco. Tal vez esa sea la premisa de los editores del NOA, que siguen conectando a autorxs y lectorxs, con proyectos jóvenes que multiplican voces diversas y enriquecen el ADN del arte, con un gesto federal e innovador que muchxs deberían imitar.