El suizo Roger Federer tendrá mañana la oportunidad de lograr su octavo torneo de Wimbledon y 19° Grand Slam, luego de superar ayer en las semifinales del torneo londinense al checo Tomas Berdych 7-6 (7-4), 7-6 (7-4), 6-4. Federer se enfrentará en la final al croata Marin Cilic, que superó antes 6-7 (6-8), 6-4, 7-6 (7-3), 7-5 al estadounidense Sam Querrey. Será el octavo enfrentamiento entre ambos, con un balance de 6-1 a favor del suizo. A menos de cuatro semanas para cumplir 36 años, Federer está a una victoria de escribir una nueva página de oro en su impresionante currículum. El ex número uno tenía la cuenta de grandes certámenes en 17 desde Wimbledon 2012, y los problemas físicos lo apartaron de la competición los últimos seis meses de 2016.
Pero no pudo tener un mejor regreso a la competición, ganando el Abierto de Australia, y ahora está a las puertas de estirar hasta 19 su lista de Grand Slam. Federer acaricia con la yema de los dedos lo que hace siete meses parecía algo imposible.
“Hacer historia en Wimbledon es algo importante. Amo este torneo”, comentó Federer en rueda de prensa. “Todos mis sueños como jugador se hicieron realidad aquí. Tener otra oportunidad de ir por el octavo título es una gran sensación”.
Desde luego no fue ayer el mejor partido de Federer en lo que va de Wimbledon. Aunque también es algo lógico que no pudiera mantener el nivel que mostró en octavos y cuartos, ante Grigor Dimitrov y Milos Raonic, respectivamente. “Está jugando el mejor tenis de su carrera en esta pista, que es como su casa”, dijo Cilic, campeón del US Open 2014, antes de saber si jugaría ante el de Basilea en la final.
Aunque ayer no estuviera todo lo fino que uno se pudiera imaginar, el tenista favorito de los hinchas en el All England aterrizará en la final de mañana sin haber perdido un set en todo el certamen, algo que ya hizo en 2006 y 2008. Es más, a esas seis victorias en el césped de Londres hay que añadir otras cinco en Halle sin perder un parcial.
El considerado mejor tenista de todos los tiempos disputará su final de Grand Slam número 29 y la undécima en Wimbledon, donde busca convertirse en el primer hombre que llega a las ocho copas. Actualmente está empatado con William Renshaw y Pete Sampras, y sólo tiene por delante los nueve de la legendaria Martina Navratilova.
Con 35 años y 342 días, Federer es además el segundo tenista más veterano en llegar a la final de Wimbledon desde Ken Rosewall en 1974, con 39 años y 246 días. “Significa mucho haberlo conseguido”, dijo el ex número uno, mientras Rosewall todavía aplaudía desde la grada de la cancha central. “Me siento un privilegiado por estar en una nueva final. Es un placer jugar tantas veces en esta pista, y no puedo creerme que sea verdad otra vez”, destacó Federer luego del partido. “Espero jugar una buena final”, agregó.
Finalista del torneo en 2010, Berdych fue el tenista que más problemas, si se le puede llamar así, le presentó al suizo. Opuso resistencia el checo, pero no como para incomodar del todo a Federer.
Ahora es Cilic lo único que le separa del título. El croata venció a
Federer en las semifinales del US Open 2014, y el año pasado desperdició tres match points y una ventaja de 2-1 en sets en los cuartos de Wimbledon.
“Aquél fue un partido brutal. Salvé varios match points. Conozco bien a Marin, es un gran tipo y me alegro de que haya llegado a su primera final aquí. Aunque espero que no juegue tan bien como cuando me ganó en el US Open”, señaló Federer.
Cilic, sexto del ranking mundial, también recuerda bien aquel duelo. “Estuve a un punto de ganar”, dijo ayer el campeón del US Open 2014, torneo en el que sacó a Federer de la final. El croata llega posiblemente en el mejor momento de su carrera a la final de Wimbledon. Desborda confianza por todos lados, pero a veces ni eso es suficiente cuando el partido es una final, se juega en el césped del All England y el rival es Federer.
“Creo en mis posibilidades para salir y ganar, pero sé que es una montaña muy alta de escalar”, señaló Cilic. “Roger está jugando quizás el mejor tenis de su carrera y está teniendo una gran temporada. Sé que es un enorme desafío, pero creo que estoy listo”, dijo.