El Presidente Alberto Fernández y el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezaron la inauguración del nuevo techo que cubre toda la estación platense de la línea Roca. "Para la Provincia, la red ferroviaria no es una cuestión logística, ni turística, es una cuestión histórica" remarcó Kicillof. La inversión fue de 986 millones de pesos.

Tras el inicio de la obra en septiembre del año 2020, concluyó la remodelación del techo de la estación de trenes platense, que beneficia a las casi 20 mil personas que la transitan. Los trabajos incluyeron la renovación absoluta de la estructura metálica, la recomposición completa de chapas y vidrios y la colocación de una nueva luminaria Led. Además, los trabajos incluyeron un nuevo sistema de audio, la renovación de las pasarelas y las instalaciones de mantenimiento para el lavado de techos.

Además de Fernández y Kicillof estuvieron el ministro de Transportes, Alexis Guerrera (poco antes de que comenzaran las versiones sobre su renuncia, luego confirmada), la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y el presidente de Trenes Argentinos, Martín Marinucci. Fernández señaló que el tren es “un medio de conectividad importantísimo y central en la modernidad, no solo en Buenos Aires sino en todo el país”, a la vez que se alegró porque gracias a esto hay argentinos que encuentran un modo de llegar “mucho más ágil, fácil y económico”.

“Celebramos que el tren vuelva a ser una herramienta de transporte para los argentinos y las argentinas. Esto lo recuperó el Estado para quienes habitan esta tierra. Es progreso y calidad de vida” subrayó el mandatario.

“Nuestro presidente ha tomado la firme decisión de recuperar el sistema ferroviario nacional", destacó Guerrera al comienzo del acto. "Las obras públicas, a pesar de las vicisitudes, tienen que terminarse porque son para el bienestar de los argentinos. Este gobierno, con este presidente y este gobernador a la cabeza, decidieron retomar esta obra para el beneficio de todos los usuarios.”

Kicillof remarcó la importancia de los ferrocarriles al señalar que "el tren nos devuelve el derecho a vivir mejor, a recorrer, a trabajar y el derecho al futuro". "La extensión territorial de la Provincia de Buenos Aires y las localidades del conurbano tuvieron sus orígenes en la estación del tren. Cuando se cerraron las vías y los ramales, fue una puñalada en el corazón de los bonaerenses”, afirmó en alusión al primer levantamiento de vías durante la dictadura y al segundo con la presidencia de Carlos Saúl Menem. 

La estación platense fue inaugurada el 1 de octubre de 1906. El presidente la destacó en términos arquitectónicos y aseguró que la refacción continúa: “Es deslumbrante. Hay que estar orgullosos, me hace feliz reencontrarnos en esta magnífica estación. Se recupera para el uso de los bonaerenses pero también se recupera como acervo cultural y de riqueza de la Argentina toda. No hemos terminado las obras, pusimos el techo para facilitar la cotidianidad pero las obras siguen, porque vamos a poner en valor la cúpula y toda la entrada para que esta magnífica estación tenga lo que merece”.

Quienes tomaron el micrófono destacaron además el uso universitario del tren. Destacando ese rol, Fernández categorizó a la Universidad Nacional de La Plata como “importantísima” para el desarrollo del país, ya que alberga estudiantes de la región y de todo el país. Sobre esa base, se mostró entusiasmado con el futuro platense: “La Plata puede volver a ser una gran ciudad. Es la capital de la mayor provincia de nuestra patria, donde emergieron personas maravillosas”.

Los sin techo

En el año 2017 y bajo la gestión de María Eugenia Vidal, los vidrios y las chapas del techo de la estación habían sido desmontados con la idea de ser renovados, cosa que nunca ocurrió. 

Kicillof destacó que no fueron años de "de suspensión ni de demora” sino que fueron “de retrocesos en el sistema ferroviario por muchísimas obras que no se hicieron”. Remarcó que la estación -sin su techo- era “un símbolo espantoso del abandono, de la desidia y la decadencia” y, a su vez, resaltó que “Las obras que no se hicieron no fueron un fracaso ni de un país, ni de una provincia, sino de una idea política de vaciamiento, de la idea de retirar al Estado y dejar sin nada a los bonaerenses”.

Por su parte, el presidente remarcó que "en 2017 la gente esperaba el tren con paraguas y la lluvia caía de manera inclemente”. Junto con ello destacó la imposibilidad de colocar los tótems con botones de pánico debido a que el agua los deterioraba y subrayó con tono tragicómico: “Eso ocurrió en un tiempo en donde estas cosas no importaban. Los últimos que se ocuparon en cuidar la estación fueron productores de Hollywood, que la arreglaron porque venían a filmar una película con Brad Pitt". "Esto sirve para marcar diferencias: algunos piensan que Hollywood tiene que reparar lo que los ciudadanos de toda la provincia usan, en cambio nosotros creemos que esto lo tiene que hacer el Estado”, afirmó.