El equipo de Gustavo Alfaro venía siendo una de las revelaciones de Qatar 2022, luego de quedarse con el partido inaugural (2 a 0 contra el anfitrión) y sacarle un 1 a 1 en la segunda fecha a Países Bajos e incluso merecer algo más que los naranjas en aquel partido. Con la buena cosecha de sus dos primeras presentaciones, a Ecuador le alcanzaba con sumar un empate este martes ante Senegal para meterse en octavos de final y repetir la gesta de la Tri en Alemania 2006, cuando pasó de fase y registró su mejor actuación histórica en Mundiales.

Pero todo lo bueno que hizo Ecuador en los primeros partidos, se lo olvidó ante los senegaleses. Fue derrota 2 a 1 ante el campeón de África y clasificación a octavos para el equipo que se impuso con goles de Ismaila Sarr, de penal, y el central Kalidou Koulibaly.

Ecuador salió como dormido al partido o, en todo caso, Senegal estuvo muy despierto. Ya en el tercer minuto de juego el equipo dirigido por Aliou Cissé -el de espectacular look de gorra y rastas- tuvo la primera de peligro con una llegada clarísima de Idrissa Gana Gueye, quien remató al lado del palo del argentino Hernán Galíndez.

Senegal siguió y siguió atacando ante un Ecuador que no le encontraba la vuelta a los ataques por afuera de los africanos y que tampoco mostró la intensidad que caracteriza a los equipos de Alfaro. Pero cuando parecía que la Tri había logrado controlar a su rival, a la vez cansado por el empuje inicial, el exTalleres Piero Hincapié cruzó al indomable Ismaila Sarr dentro del área y el delantero del Watford de la Segunda División inglesa lo cambió por gol luego de dejar arrodillado a Galíndez en el penal.

Alfaro intentó despertar a los suyos en el vestuario y también a la salida al segundo tiempo con dos cambios. Pero el equipo nunca pudo mostrar su mejor versión, esa que tiene a Pervis Estupiñán causando destrozos por la banda izquierda y al goleador Enner Valencia rompiendo récords (se va con tres goles en la Copa).

Fue entonces a través de la pelota parada que Ecuador tuvo sus mejores chances e incluso así llegó el empate, a los 67 minutos, con una muy mala tarea defensiva de Senegal -un hombre en el primer palo habilitaba a todos- en un centro de córner que terminó con Moisés Caicedo empujándola abajo del arco.

No le duró nada la alegría -ni la clasificación temporaria- a Ecuador ya que a los 70 los que se equivocaron en una pelota parada fueron los sudamericanos. Enner Valencia quiso despejar un centro y terminó habilitando a Koulibaly, el jugador del Chelsea y gran capitán senegalés, quien puso el 2 a 1 y el pase definitivo de su selección a octavos de final, como en 2002, cuando llegaron a cuartos de final (en su otra participación, en 2018, no pasaron de fase de grupos).

Para los de Alfaro, que habían hecho historia al meter a Ecuador en su cuarto Mundial, mucho gusto a poco y ni siquiera una chance de gol agónica para "cazar la utopía imposible", como se titula el libro que el rafaelino sacó tras clasificarse a Qatar. Más cierto que nunca.