La gran mayoría de las trabajadoras de casas particulares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) vivieron situaciones de violencia y de acoso laboral, incluso con asiduidad, según una investigación realizada por el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) para la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Los resultados del informe titulado “Estudio cualitativo sobre violencia y acoso en el sector del trabajo doméstico”, realizado entre mayo y junio de 2021, ubican al trabajo en casas particulares como uno de los sectores más expuestos a la violencia y el acoso, donde la privacidad del lugar de trabajo, los altos niveles de informalidad y la baja valoración social y económica parecen favorecer el surgimiento y la perpetuación de comportamientos indebidos.
Los principales comportamientos y prácticas que afectan a las trabajadoras de casas particulares incluyen acoso psicológico, humillaciones, insultos, violencia sexual, contacto físico indeseado y daño económico por irregularidades en el pago de los salarios.
También el bajo conocimiento sobre la legislación que regula al sector, tanto por parte de las personas que emplean como de las trabajadoras. Se observó un marcado descreimiento en la institucionalización de los conflictos como vía de resolución efectiva, ya que ante las situaciones de violencia el abandono del trabajo es el mecanismo más utilizado.
El informe agrega que las trabajadoras domésticas más afectadas por esta problemática son las mujeres jóvenes y migrantes, quienes particularmente mencionaron haber sido objeto de acusaciones de robo ante la desaparición o pérdida de algún objeto de la casa.
Datos del sector doméstico en Argentina
Actualmente, el sector de casas particulares en Argentina emplea cerca de 1,4 millones de personas en todo el país y se trata de una actividad casi exclusivamente realizada por mujeres (99,3% ), que representa al 17,4% de las mujeres ocupadas y el 22% de las asalariadas.
Asimismo, cuenta con una tasa de informalidad del 77%, según un informe de 2020 de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) y Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
Ante esta situación, en 2021 se creó el Programa Registradas, que busca promover el acceso y la permanencia del empleo de las trabajadoras de casas particulares, garantizar sus derechos y su inclusión financiera y avanzar hacia la igualdad de género.
Entre otras conclusiones, el estudio plantea una serie de recomendaciones para intervenir en políticas, como realizar mesas de trabajo tripartitas para establecer una definición consensuada de violencia y acoso en el sector y diseñar estrategias de concientización y sensibilización.